Himno a Atón y salmo 104

La influencia de Egipto sobre el pueblo Hebreo está marcada por un acercamiento geográfico durante un periodo de tiempo específico donde podemos apreciar similitudes y coincidencias en el aspecto religioso. Una de las formas para apreciar la dicha influencia es la comparación del himno a Atón escrito por Amenhotep IV y el Salmo 104.

Los hebreos han conformado una parte de su religión e identidad con ideas ajenas pues no escatimaban en enriquecer su cultura con influencia de otros pueblos.  En el periodo en que los hebreos eran tribus semíticas y un tanto nómadas, específicamente el periodo conformado desde el génesis al éxodo, los historiadores han podido apreciar la influencia de cuatro diferentes culturas. De los amoitas tomaron la idea de que Dios transmitía mensajes, de Mesopotamia su manera de ver y explicar el mundo, de Canaán el idioma hebreo y de Egipto la tradición de los himnos. Algunas historias de otras culturas se han filtrado a la biblia  como es la historia del diluvio de Gilgamesh originalmente pues es similar al diluvio de Noé.

Hay influencia Egipcia en los hebreos porque residieron un tiempo en Egipto. Es importante tener en cuenta que los únicos registros precisos que se tienen de ellos son los de La Biblia y su historia es comprendida por medio de esta. La historia de este pueblo comienza en Mesopotamia específicamente en Ur. Después se trasladaron a Harrán, seguidamente a Canaán y finalmente llegan a Egipto. La biblia nos dice que José el hijo de Jacob obtuvo un alto puesto en la política egipcia luego de llegar como esclavo vendido por sus hermanos. Al pasar los años los hebreos fueron sometidos por los egipcios hasta la llegada de Moisés quien los guío a la tierra prometida de Dios. Durante este periodo de tiempo es evidente que hubo una mezcla entre las culturas pero, ¿Qué tanta es la influencia egipcia en la religión hebrea?

La primera de las similitudes entre los textos a tratar y la más importante es la idea del monoteísmo. Cabe recordar que el Egipto antiguo, como todas las civilizaciones de su tiempo, era politeísta. El cuerpo sacerdotal era sumamente poderoso y gozaban de poder político. La ascendencia de Amenhotep IV a faraón lo llevó a tratar de disminuir la influencia de los sacerdotes. Para lograr su objetivo,  se apropió del Dios Amón e hizo tres cambios fundamentales: cambiar de ubicación la capital de Egipto, cambiar de nombre al divino y a él mismo, y el más importante, imponer el monoteísmo. En el himno dirigido a Atón escrito por el faraón Amenhotep IV encontramos el reconocimiento de este como único y supremo. Los hebreos por su parte son el primer pueblo que reconoce oficial y de forma permanente el monoteísmo. La Biblia dice <>. Es la primera comunidad que estaba unida no por el espacio geográfico sino por  la religión pues eran el pueblo elegido por Dios.

Otra coincidencia entre los dioses es que son creadores de la vida y descritos como glorioso. Traen la obscuridad a sus pueblos. Son los astros creados por el Dios del salmo quienes determinan las actividades y las criaturas destinadas para el día y para la noche. Así como es la presencia de Atón (el sol) que marca los horarios de trabajo y descanso. Incluso ambos himnos mencionan al león como ser de la noche.

La primera de las acciones del nuevo faraón fue cambiar de capital a Egipto de Tebas, donde se profesaba principal y fuertemente el culto a Amón, a la actual Amaran. A la nueva sede del poder la llamó Akhenatón. Después, cambió el nombre de Amón por Atón el disco solar. También cambió su propio nombre por el de Akhenaton que significa <>. El tercer cambio fue al monoteísmo.

No obstante, existe la creencia histórica de la estadía temporal de los pueblos hebreos en Egipto y a su vez la evidencia de que no escatimaban en enriquecer su cultura con la influencia de otras. El orden en que presentan las características de sus respectivos dioses no es el mismo pero hay una similitud en sus esencias. Hay coincidencias no comunes como la voluntad del dios hacia la vida y el regimen de trabajo marcado por el dia y la noche. Así como que en ambos se menciona al león como principal animal de la noche.  Es importante recalcar que Atón es un predecesor del monoteísmo, que es una de las características que distinguió al pueblo hebreo. El monoteísmo es pues tal ves la mayor contribución de los hebreos, ¿pero hasta qué punto este concepto es original? Aunque nunca sabremos la influencia exacta de Atón a los salmos, podemos hacer análisis y comprobar que en efecto hay coincidencias.

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