Imperio Romano

Imperio Romano (27 a.C.-476 d.C.)

Luego de varios conflictos sociales y guerras civiles, lo que era en ese entonces Republica Romana había colapsado, y llegando en su reemplazo se desarrollo un nuevo sistema político llamado Imperio, en el cual todo el poder se centraba en el emperador, se mantuvieron algunas instituciones, por ejemplo el Senado, pero esta vez bajo el cargo del emperador. En este periodo los romanos se preocuparon principalmente de expandirse territorialmente para lograr un desarrollo cultural y económico.

Con su expansión territorial el Imperio Romano ha tenido una gran importancia con respecto a su cultura, ya que durante el periodo de expansión la fue dejando en distintos pueblos, los cuales con el transcurso del tiempo supieron mantener y traspasar a las siguientes décadas. El cristianismo y las maravillosas obras arquitectónicas forman parte también del legado que este Imperio ha dejado a nuestros días, y que fueron de real relevancia en su época.

Como nada es para siempre, debido a distintas crisis que tuvo Roma durante este periodo, como guerras civiles, problemas económicos, divisiones territoriales y cambios culturales religiosos, el Imperio Romano colapso en el siglo V.

El imperio se dividió en provincias gobernadas por legados nombrados Augusto. Octavio fue el primer emperador, el cual ejerció un sistema de gobierno absoluto: la Autocracia, en donde la voluntad de una persona, en este caso el emperador, es la suprema ley, por lo que fue consular y tuvo el poder tribunicio, teniendo el derecho de convocar al Senado, presentar propuestas, vetar dediciones, nombrar candidatos para las elecciones y publicar decretos, también pudo influir en el gobierno y llevar a cabo amplios programas de desarrollo. Es ayudado a gobernar por una especie de consejo imperial (Senado) pero con la diferencia que esta vez, esta institución estaba controlada por Augusto, (en contraposición de la Republica Romana donde el Senado era el órgano que dirigía la política romana, controlando la actuación de los magistrados y aprobando leyes) y era de su total confianza. En el gobierno de Octavio se vivió una clase de Pax Romana que duro alrededor de 2 siglos, la cual facilitó la Romanización (proceso de aculturación en las provincias conquistadas), expansión del cristianismo, las artes y la universalización de la ciudadanía Romana.

Para los romanos era necesario fortificar las fronteras de forma inmediata, por lo que las primeras expediciones se hicieron a las Galias e Hispania. Trataron de conquistar del río Rin al Elba, pero por culpa de los Germanos estuvieron forzados a tomar como frontera al río Rin. Cuando alcanzaron la máxima expansión estaban bajo el poder de Roma el norte de Europa hasta los ríos Rin y Danubio, incluyendo la Britania, hasta el mar Negro, y por Africa Septentrional, hasta la línea del desierto del Sahara. Cuando determinaron que el Imperio estaba consolidado, se preocuparon de fortalecer las fronteras inestables y peligrosas que determinaban los limes imperiales; construyeron la muralla de Adriano, entre Inglaterra y Escocia, y la gran línea de fortificaciones situada entre el Rin y el Danubio en la Germania. El espacio físico en el que se expandió Roma era de grandes dimensiones, y dentro de todo lo que abarcaban los limes existía una diversidad de pueblos. Obviamente este proceso de asentamiento en el territorio de los pueblos que no eran romanos duro muchos años, junto con eso los romanos comenzaron a hacer un proceso de romanización, difundiendo su cultura; la mas importante la lengua latín, que con el tiempo desaparecerá con la caída del Imperio Romano debido a que los pueblos germanos se asentaron en su territorio derrocándolos, por lo tanto de la combinación de la lengua latín con la germana nació la lengua romance, como por ejemplo; el español, italiano, francés, portugués, etc. El que la cultura haya podido ser difundida con éxito se debe gracias a la permanencia del ejército en las provincias y fronteras del Imperio. Ellos fueron fundamentales en la romanización manteniendo la cohesión territorial, formando luego varias ciudades. Las personas de los pueblos conquistados podían ser parte

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