Mexico En Los Mundiales

Ante la desgracia de sólo haber faltado a 5 de los 18 mundiales anteriores, muchos de las marcas negativas nos pertenecen: nuestra meta sólo resistió 10 minutos antes de recibir el primer gol de la historia de los Mundiales en 1930, cuando el francés Laurent nos clavó el primero de cuatro goles; en ese mismo Mundial, jugamos contra Chile el partido con menor asistencia de la historia de las copas; hemos recibido la mayor cantidad de goles con 84; somos uno de los 2 equipos (el otro es Alemania con Matthäus) con un jugador que ha jugado 5 mundiales, aunque el alemán participara en 25 partidos y fuera campeón una vez y subcampeón dos, mientras que “la Tota” Carvajal sólo ganó un juego y nunca pudo pasar de la primera ronda; tenemos el honor de poseer el mayor número de derrotas con 22; el partido contra Sudáfrica será el sexto partido inaugural en el que participemos, y fuera del 0-0 contra la URSS como locales, los hemos perdido todos, con un gol a favor y 16 en contra; tenemos también la inmensa fortuna, pero eso es nuestro destino manifiesto, de jugar con equipos que llegarán lejos: en 1930 nos tocó jugar con el subcampeón Argentina; en 1950, con el subcampeón y local Brasil; en 1958, contra Suecia, local y subcampeón; en 1962 enfrentamos al campeón Brasil y al subcampeón Checoslovaquia, al que vencimos siendo nuestra primera victoria en la historia; en 1966 jugamos contra el local y campeón Inglaterra; en 1970 nos eliminó el subcampeón Italia; en 1986 nos eliminó el subcampeón Alemania; en 1994 empatamos con el subcampeón Italia y fuimos eliminados por el cuarto lugar Bulgaria, la tarde de los cambios ausentes; en 1998, nos tocó la máquina holandesa, que terminó en cuarto lugar.

Y así seguimos, nuestros 3 autogoles mundialistas nos colocan en la primera posición de ese rubro; de las 5 copas en las que no hemos participado, en la de 1990, nos eliminó la corrupción de los cachirules, y en 1934 y 1974, perdimos el partido clasificatorio porque los jugadores se emborracharon la víspera del juego: los del 34 en el barco que los llevaba a Roma, instigados por “El trompo” Carreño, una especie de “Toluco” López del futbol, que sacaban de las cantinas para llevarlo a la cancha, y en 1974, en Haití, previo a la semifinal contra Trinidad y Tobago, que perdimos 4-0, contra la potencia caribeña.

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