Capitulo 1 Demian

Libro: Demian
Autor: Hermann Hesse

El primer capítulo habla de cuando el protagonista, que aún no menciona su nombre es pequeño, él cuenta que cuando era pequeño vaya, para el existían dos mundos el mundo de la luz y la bondad que era su casa, con sus padres y sus hermanas, y el mundo de las tinieblas o misterios que era el mundo exterior, donde había ladrones, personas malas y groseras, etc. A él le daba mucho miedo el mundo de las tinieblas, pero también le daba mucha curiosidad por descubrir los misterios que había en ese mundo exterior a su casa. Iba a una escuela muy buena y tenía compañeritos, algunos pésimos y otros muy buenos.

Aquí el protagonista cuenta una historia, un relato. Este relato cuenta que cuando tenía 10 años, estaba jugando afuera de su casa en el vecindario con dos amiguitos más y en eso llego un muchachito de 13 años y era un completo brabucón que era hijo de un sastre de la ciudad y borracho, el chico se llamaba Franz Kromer. Al niño le daba mucho miedo Franz, y sus papás no le dejaban juntarse con ese tipo de personas y más con ese chico.

El chico se puso a jugar con los niños y los puso a sacar cosas “valiosas” de los escombros que se encontraban a la orilla del rio. Los niños lo obedecían, después que terminaron de jugar y llevarles cosas valiosas a Franz, decidieron ponerse a contar historias, pero eran historias de delitos o cosas malas que los demás niños alardeaban, el protagonista tenía miedo a que Franz le pegara o le hiciera algo malo por no decir nada, ni contar nada y portarse bien, así que decidió decir una mentira para poder alardear y pasar desapercibido ante Franz.

El niño conto que se había robado el y un compañero las manzanas caras del huerto de al lado, presumió que se las llevo en dos partes, Franz no le creía y lo cuestiono varias veces hasta que hizo que el niño jurara por Dios que si lo había hecho, el niño por miedo lo dijo.

Franz acompaño al niño a su casa, y allí solos le dijo que lo iba a acusar con el molinero que era el dueño del huerto que robo las manzanas, dijo que le iba a pagar dos marcos a quien delatara al ladrón. El niño asustado le ofreció varias de sus cosas porque no tenía dinero, Franz no acepto nada de eso y dijo que si no le daba sus dos marcos pronto lo iba a acusar y que se atuviera a las consecuencias.

El niño no encontraba solución y la culpa no lo dejaba en paz, deseaba que no hubiera pasado, deseaba haberle hecho caso a su padre de no juntarse con ese tipo de personas, pero ya no podía hacer nada. El niño se sentía muy culpable y Franz lo molestaba frecuentemente por no pagarle.

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