El Tunel

Juan Pablo Castel es un hombre extraño, un pintor enigmático con una forma particular de pensar. En este cuento, Pablo cuenta la anécdota de porque mato a María Iribarne, una joven que lo entendía como nadie más podía.

Juan tiene ideas confusas y es difícil seguir su paso de narración, parece ser un pintor elitista y egocéntrico, y sobretodo poco tolerante, que siempre justifica su forma de pensar, aunque sea de mala gana.

Fue en una de sus exposiciones de arte cuando vio a María por primera vez. Juan había hecho un cuadro que tenía tanta importancia como todos los otros cuadros, y tenía a la izquierda una ventanita en la cual se miraba atreves a una mujer que veía el mar. Juan había pintado esta ventanita como un sonámbulo, casi sin pensar en lo que hacía, y sin saber porque, le daba gran importancia a esta ventanita, para él, significaba muchas cosas más que solo una mujer viendo el mar y aun así nadie había prestado ni la más mínima atención a esa ventanita que hipnotizaba a Juan. De repente, entro una chica castaña que demostró un interés hacia la ventanita que cautivo a juan y lo dejo obsesionado por días. La veía en su imaginación día y noche y se preguntaba qué le diría cuando por fin la viera.

Pasaron meses sin ninguna suerte, pero un día la vio en la calle, desconcertado y confundido por las decisiones que en ese entonces parecían fantasías y ahora cobraban vida, listas para ser tomadas. Se decidió por fin a seguirla y tomarla del brazo antes de entrar a Compañía T. Hablaron cosas confusas y ella huyo. Entonces juan, decidido, espero todo ese día, y una buena parte del anterior por señales de María en la Compañía T, pero por fin, se apareció y juan no pudo desaprovechar la oportunidad de hablarle y la tomo del brazo y se la llevo.

Juan le comento de como estaba consternado por su forma de mirar la ventanita y le dijo que la necesitaba, aunque no sabía bien como. María estaba asustada y desconcertada, así que no salió mucho de la plática y juan le prometió hablarle al día siguiente.

Lo prometido es deuda y Juan le hablo en la mañana, pero fue grande su sorpresa cuando le informaron que María había ido al campo y que le había dejado una carta que tenía que recoger. Él fue a su casa y se sorprendió aún más cuando el esposo de María, Allende, fue el que le entrego la carta.

Esto levanto un muro de preguntas para Juan que no pudo responder con ningún tipo de claridad.

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