LENGUAJE Y REDACCIÓN

UNIVERSIDAD NACIONAL DE TRUJILLO

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS

ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE CONTABILIDAD Y FINANZAS

CURSO: LENGUAJE Y REDACCIÓN

NOMBRE: MARCO ANDRÉS CHUQUIBALA MEZA

FECHA: 26-05-201

Poder  y lenguaje. Reflexiones sobre los paradigmas y las paradojas de la legitimidad de las relaciones de dominación y de opresión. (Resumen)

El autor ha desarrollado este ensayo en una secuencia de tres etapas, las cuales se concatenan para llegar a una conclusión: existe una relación entre lenguaje y poder. En la primera etapa aborda sobre la relación que existe entre el lenguaje y el poder. Para esto ha tomado como referencia a una tribu de Nueva Guinea: los Baruya. Es una sociedad sin clases sociales pero con el poder en mano de los hombres adultos, quienes ejercen su autoridad sobre la gente joven y niños, y sobre las mujeres cualquiera sea su edad. Ese poder lo adquieren por medio de ritos de iniciación secreta, el que usando un leguaje secreto limitado sólo para los hombres, aprenden sobre varios aspectos de la vida. Es así que los hombres adquieren un sentimiento profundo de superioridad a lo largo de toda su vida.

En una segunda parte el autor habla sobre las razones por las que se acepta el poder de algunos sobre otros. Y dice que no es la violencia física lo que da poder a la minoría, sino el haber logrado el consentimiento voluntario de la mayoría dominada, hasta el punto que ven la dominación masculina como legítima.

Todas estas formas de dominación ya sea por parte de los hombres adultos o de algunos clanes, la han conseguido valiéndose de medios simbólicos transmitidos a través de generaciones por medio del lenguaje. De esta manera se ha logrado diferenciar entre una clase dominante y una dominada.  Y es ese proceso que ha llevado posteriormente a la aparición del Estado, no como un ente extraño, sino surgida de su propia evolución. Por eso se considera a la aparición del estado como legítima. Pero según el autor, el Estado no conviene a la sociedad, a pesar de que muestre un interés por todos; porque en realidad en la estructura del estado siempre es marcada la dualidad que existe: el desarrollo y bienestar de una minoría por un lado, y la explotación de una mayoría. Por eso es necesario que el Estado así como apareció legítimamente, también desaparezca legítimamente como resultado del desarrollo de nuevas fuerzas de producción y cuando las sociedades futuras retomen el control de los medios de producción. A la par con el Estado, la religión también desaparecerá, cuando se desacralice las relaciones sociales, porque la religión siempre ha ido de la mano con el estado para lograr la opresión y dominación.

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