Mio Cid Ensayo
Enviado por jrmmauricio • 3 de Junio de 2015 • 390 Palabras (2 Páginas) • 282 Visitas
Mauricio Marcano
C. I 27202233
N° 22 ; 5to CS “B”
El Cantar de Mio Cid.
El Cantar de Mio Cid es una obra de cantar de gesta el cual su autor es anónimo, inspirada en un caballero de la vida real. En esta obra épica de la literatura española se da a conocer la lealtad y la importancia que esta tenía en aquella época (alrededor de 1040 – 1099). Esta creación se converja en 3 cantares, Destierro del Cid, Cantar de las bodas y La afrenta de Corpes.
La historia se presenta en un instante donde se aproximaba un ataque al Rey de Sevilla quien era la mano derecha de su Rey don Alfonzo, el Cid anuncio que no destruyesen sus tierras pero estos hicieron caso omiso y emprendieron lo contrario destruyendo todas las tierras hasta el castillo de Cabra, Mio Cid por su parte ataco a los siervos del Rey de Granada venciéndolos. El Rey don Alfonzo fue invadido por comentarios de envidia hacia el Cid le envió una carta pidiéndole que despojaras su reino.
El Cid aceptó la decisión de su señor y se fue con aquellos que quisieran irse con él, dirigiéndose hacia Burgos despidiéndose de su esposa Ximena y sus dos hijas doña Sol y doña Elvira. Una vez ya conquistado muchas tierras el Cid y asentado en Valencia pide que traigan a su esposa y sus hijas. De forma perversa los infantes de Carrión porque la fortuna del Cid había crecido decidieron desposar a las hijas del mismo, cuestión que al Cid no le pareció fructuoso pero aceptó. Los de Carrión llevaron gran susto y burla cuando un león se escapó por lo que tomaron como desquite llevar a las hijas del Cid al bosque y azotarlas hasta que creer que estaban muertas. Cid envió a su vasallo con rey Alfonzo y así tomar venganza por la deshonra que le han hecho.
Una vez de vuelta el Cid con el rey Alfonzo, y reclamando justicia en la que el rey estaba en todo acuerdo porque fue él quien incentivo a ese casamiento, se realizó una justa donde se veía a los de Carrión muy arrepentidos, una vez en marcha la justa solo se esperaba a ver caer muertos a los combatientes. Mio Cid señor de Valencia murió en la pascua de Pentecostés de aquel siglo.
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