Regreso Al Furo

Hoy les presento este libro que me parece muy interesante y de actualidad inmediata que nos compete a todos los que habitamos este extraordinario (en todos los ámbitos) país.

Es una lectura que nos traen los especialistas en política y crítica social Héctor Aguilar Camín y Jorge G. Castañeda y que nos hará reflexionar sobre el México en que vivimos en estos días. El o los por qué de nuestra realidad y de dónde viene ese bagaje cultural y social que llevamos arrastrando desde hace mucho tiempo como sociedad.

Se nos muestra un México que avanza (si bien con sus tropiezos y carencias) gracias a la gente y nos muestra una mejora sustancial en comparación con otros tiempos/regiones de Latinoamérica; imágenes que no estamos acostumbrados a ver y, por lo regular, ni a imaginar siquiera.

No dejando de apuntar hacia temas relevantes y actuales que tienen que ver con corrupción en los estados devenida de la complicidad de gobernadores con congresos locales que aprueban presupuestos sin un mecanismo regulatorio por parte de la federación que reclame cuentas claras de los millones y millones de pesos que se les asignan previamente “etiquetados” pero que ellos pueden cambiar a su antojo. No deja de apuntar con el dedo índice a estadísticas de crimen organizado que a veces no son tan garrafales como los medios suelen aprovechar para vender notas. Trata también el tema de la educación pública en México; su estancamiento debido a mala dirigencia tanto en instancias federales como en el quehacer sindical que en vez de ver por la mejora de la educación se empeña en conservar el gane en los juegos políticos y asegurarse el lugar cómodo con el que actualmente cuenta y que no quiere participar en evaluaciones que determinen su desempeño y que regulen su premiación o castigo. La necesidad de formar sociedades reguladoras dentro de las mismas escuelas. Comenzando por implantar directores capaces y con verdadero liderazgo. Puesto que debe ser otorgado debido a sus méritos propios y no como parte del clientelismo político del sindicato. En materia de seguridad ciudadana también hacen un análisis del estado de derecho que guarda el país. Nos recuerda que la corrupción no cobra vida solamente en los cuerpos policiales sino en todo un entramado que comienza desde los jueces y que abarca todo el aparato judicial y de impartición de justiciad en la nación.

Indudablemente una lectura pensada para individuos que trabajan, estudian, piensan todos los días por una realidad mexicana donde pueden contribuir al bienestar y crecimiento de su persona, su familia, su comunidad, si ciudad, su país.

En contraparte, definitivamente esta no es una lectura apta para el típico catastrofista donde todo está mal en México y nada puede arreglarse ya. Y Claro está que este estereotipo mexicano también emplea como lema de batalla el “a ver a qué horas el gobierno hace algo” mientras espera sentado frente a su monitor desmenuzando la problemática del país en su muro de Facebook; lectura no apta para individuos que no trabajan concienzudamente pero quieren resultados, gente que protesta por la oferta cultural que ofrece su cuidad pero que no deja de ver televisa y tv azteca, gente que no lee pero quiere que México deje de tener pobreza, exclusión indígena, hambre y miedo al crimen organizado…. Simplemente imposible. Son ellos los verdaderos mexicanos soñadores y no los que saben y creen que las soluciones no vendrán fácilmente bajo ninguna instancia y que solamente se llegará a ellas mediante una educación de calidad, una concientización ciudadana basada en el conocimiento y no en la retórica de líderes estériles, un auto convencimiento real de que mientras en México sigamos sin el hábito de la lectura, no llegaremos pronto (ni por obra del espíritu santo que tanto nos ata las manos y los ojos) a las metas que todos deseamos.

Hasta

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