Resumen El Diario de Ana Frank

La historia es la biografía de una niña judía de 13 años, hija de comerciantes alemanes, que huyen a Ámsterdam cuando comienzan las primeras persecuciones a los judíos luego del ascenso de los nazis al poder en Alemania, pero quedan atrapados por la invasión de los Países Bajos en 1942.

El día de su decimotercer cumpleaños, Ana recibió como regalo un diario al cual lo bautiza Kitty. Ana llevaba una vida normal y agradable junto a su familia, integrada por su madre Edith, su padre Otto y su hermana tres años mayor, Margot.

Al comienzo del diario, Ana habla de su vida normal, detalla cómo era el colegio al que asistía, sus amigos y amigas, los profesores de todas sus clases y de su primer novio. Su vida era normal para una niña de su edad, pero de repente todo cambió en su vida y narra los acontecimientos que estaban sucediendo. Comenzó la Segunda Guerra Mundial y Holanda fue invadida por los alemanes. Un día, mientras caminaban por la plaza, su papá le habló de un escondite al cual debía ser necesario que trasladaran todas sus cosas y sobre todo trasladarse ellos para no caer en manos de los alemanes.

La familia se escondió en el anexo de una casa de Ámsterdam que era la oficina y almacén de la empresa del padre de Ana. En ese anexo se escondieron los cuatro miembros de la familia Frank, así como el señor y la señora Van Daam y su hijo, Peter, quien también era adolescente. En el escondite debieron adoptar varias precauciones, como no dejarse ver, no hacer ruido y ser muy cautelosos. En estos términos y bajo el reducido espacio que tenían, cohabitaron las dos familias por poco más de dos años.

Debido a la abundancia de tiempo libre que tenía, Ana comenzó a leer varios libros y escribía en su diario, sus impresiones de los mismos, así como las observaciones respecto a su existencia y a la de los demás en el refugio. En su diario, Ana narra el enamoramiento que tuvo con Peter en el refugio, cómo pasaba el mayor parte del tiempo con él, en parte como escape de su familia que en cierta forma la tenía agobiada. En el diario también escriba de la precaria alimentación que tenían, cómo sus protectores, quienes fueron empleados de su padre, obtenían las cosas que debían usar para sobrevivir y la relación que tenían con ellos.

El 1 de agosto de 1944, Ana escribió su último comentario en su diario, ya que tres días después fueron finalmente encontrados por los agentes de la Gestapo, quienes detuvieron a todos los ocupantes y los llevaron a diferentes campos de concentración. Después de permanecer durante un tiempo en Westerbork y Auschwitz, Ana y su hermana Margot, fueron deportadas a Bergen-Belsen, en donde murieron de tifus. De todos los habitantes del anexo, solo el padre de Ana sobrevivió y fue él quien encontró el diario de su hija y lo publicó.

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