TEMA 3. EL SISTEMA POLÍTICO

TEMA 3. EL SISTEMA POLÍTICO

3.0. Introducción

En este tema completamos el repaso a los conceptos básicos que nos permitirán adentrarnos en el estudio más detallado de los fenómenos políticos más importantes. En ese sentido el concepto de sistema político permite encuadrar dichos fenómenos en un marco analítico unificado. En otras palabras, este capítulo ofrece las herramientas conceptuales básicas para iniciarse en el análisis científico de la política.

3.1. Los elementos del ‘juego’ político

Los estudios politológicos, pese a su diversidad, muestran un elevado grado de acuerdo a la hora de identificar cuáles son las variables o factores clave que hay que tener en cuenta a la hora de enfrentarse al análisis y el conocimiento de los fenómenos políticos.  

Utilizando un símil deportivo, podemos decir que la actividad política se asemeja a un ‘juego’. Como en todo juego, encontramos una serie de elementos básicos:

• Jugadores (actores políticos)
• Terrenos de juego (arenas políticas)
• Reglas del juego (instituciones)
• Resultados (decisiones y políticas)
• Espectadores (opinión pública, públicos)
• Entorno (contexto político, cultural, histórico, geográfico)

1) Actores políticos: Como en todo juego, en la política hay unos jugadores que compiten entre sí por lograr un objetivo, aunque también es frecuente la cooperación. Estos ‘jugadores’ reciben el nombre técnico de actores políticos. Los actores que protagonizan el juego político tratan de influir en la toma de decisiones políticas para la gestión de conflictos sociales), encontramos distintos tipos, agrupados en dos categorías generales:

• Actores individuales > políticos, ciudadanos, empleados públicos, no ciudadano, etc.
• Actores colectivos > partidos, grupos de interés, Estados, CCAA, municipios, empresas, ONGs, organizaciones religiosas, etc.

Todos estos actores políticos tienen sus preferencias sobre cómo gestionar los conflictos colectivos que les conciernen. Estas preferencias se manifiestan tanto en la forma de  intereses (es decir, preferencias relacionadas con el bienestar material inmediato de ese actor) o valores (ideas sobre cómo debería ser la realidad). Estos actores tienen recursos, que pueden dividirse en varios tipos:

1. autoridad (véase el  tema anterior);
2. recursos económicos, organizativos (organizaciones respaldando sus acciones),
3. capital social (individuos u otras organizaciones que pueden actuar como facilitadotes de otros recursos o de acceso a las decisiones),
4. recursos humanos (personas capaces dispuestas a cooperar en la consecución del fin colectivo),
5. posicionales (una posición privilegiada en una estructura de relaciones sociales)

Estos recursos  son la base del poder que los actores utilizan para influir en el proceso político.

2) Arenas políticas: Todo juego se juega en un ‘terreno’ de juego: un campo de fútbol, una cancha de baloncesto, el entorno virtual de un videojuego, un tablero de ajedrez… En política el ‘terreno de juego’ (o, mejor, los terrenos de juego) se denominan arenas políticas. Estas pueden definirse como los distintos ámbitos donde los actores dirimen los conflictos políticos, toman decisiones y tratan de influir en esas decisiones. Estas arenas son:

1. Espacio público (las calles, las plazas, las redes sociales)
2. Arena ‘mediática’ (debates en los medios de comunicación)
3. Arena electoral (elecciones en distintos niveles)
4. Arenas deliberativas (parlamentos - parlamento nacional, parlamentos regionales, Parlamento Europeo – y foros donde se discuten ideas y políticas)
5. Arenas organizativas internas. Es decir, el interior de un partido político, un sindicato, una ONG, etc., pueden convertirse también en también terreno de juego de la política (ej. facciones dentro de la organización que se enfrentan o cooperan en torno a una posición de la organización sobre un asunto, o para ocupar las posiciones del poder en esa organización)
6. Arenas gubernamentales (gobierno central, gobiernos regionales, gobiernos locales, ‘gobierno’ de la UE)
7. Arenas administrativas (Administración del Estado, administraciones de cada comunidad autónoma, administración local, administración de la UE)
8. Arenas intergubernamentales (relaciones internacionales)
9. Arenas de políticas públicas: arenas de acción que surgen en torno a una determinada política (ej. política educativa) o una determinada medida (ej. reforma de la ley del aborto).

En cada una de estas arenas se toman distintos tipos de decisiones que pueden afectar a los actores de esa arena o a otras arenas. Los actores pueden participar en varias arenas simultáneamente (ej. un diputado elegido por el partido político X y que pertenezca a la Comisión de Educación del Congreso, participa al mismo tiempo en la arena parlamentaria estatal, en la arena organizativa interna de su partido y en la arena de la política educativa).

 Estas arenas, a su vez, se encuentran ubicadas en un entorno más amplio, formado las condiciones físicas y por relaciones sociales, culturales y económicas. De estas relaciones emergen los conflictos que alimentan el juego político.

3) Instituciones: En todo juego también hay unas reglas – en unos casos formales, en otros informales o implícitas. Estas regulan quién puede participar, qué pueden hacer los jugadores y qué no pueden hacer, cómo tienen que hacerlo, etc. El concepto técnico para estas reglas del juego es el de instituciones. Se trata de un concepto equívoco, ya que en muchas ocasiones se suele utilizar para referirse a organizaciones (ej. la Iglesia) o a arenas de decisión (ej. el Parlamento). En ambos casos, se utiliza el término institución para subrayar la estabilidad de la estructura de reglas y normas sobre las que se asienta esa organización o arena política.

Pero de manera específica, aquí utilizaremos institución en el sentido técnico de reglas y normas que regulan el funcionamiento de un grupo humano. De este modo el concepto abarcaría tanto las reglas formales (pautas formalizadas sobre el comportamiento adecuado en una situación, compartidas por un grupo humano y respaldadas por algún tipo de sanción explícita), como las reglas informales (pautas no formalizadas, y donde la sanción es ejecutada por medios tampoco formalizados) como las normas (son también pautas compartidas sobre el comportamiento correcto o adecuado, pero que no están respaldadas por implican una sanción explícita (aunque sí puede existir una sanción social implícita en algunos casos). Varios ejemplos de cada uno de estos tipos de instituciones serían:

1. formales: Constitución, leyes, reglamentos administrativos, estatutos, reglamentos orgánicos internos, etc.
2. Informales: reglas internas dentro de los partidos sobre el reparto de puestos en las listas electorales entre distintas facciones o corrientes dentro del partido; reglas sobre favorecer a los miembros o simpatizantes del partido en los contratos públicos (aunque esto vaya en contra de lo establecido por la ley),
3. Normas: normas de vestir, de habla, normas de cortesía, etc.

Cuadro 3.1. La norma sobre quién debe ser candidato al presidente del Gobierno

En la Constitución Española (art. 99) no se señala que el candidato a presidente del Gobierno nombrado por el Rey será el del partido con más escaños (solo dice que consultará a «los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria». Sin embargo, en la práctica es el candidato por Madrid de la lista más votada el que es designado candidato.

Las instituciones regulan el comportamiento de los actores en el seno de las distintas arenas de acción, influyendo de manera sustantiva en sus actos y decisiones (aunque no necesariamente determinándolos). Por ejemplo, la ley electoral no determina los resultados de las elecciones, pero sí puede influir de manera decisiva en la conversión de los votos en escaños. Buena parte del juego político gira en ocasiones a la modificación de estas reglas del juego: los actores políticos pugnan porque las reglas del juego les beneficien (ej. la modificación de la ley electoral es una de las demandas centrales de algunos partidos políticos).

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