Análisis de películas de Тerrance Мalik y su especial visión del mundo

Tesis: Terrence Malick es mundialmente reconocido por su inigualable manera de transformar el cine en una mirada metafísica del mundo, esto es debido a los rasgos característicos que muestra este director en cada una de sus obras, lo cual clasifican a este director como cine de autor.

En el mundo contemporáneo y globalizado en el que nos encontramos hoy en día la producción cinematográfica toma un papel importante en los nuevos medios. Apartándonos del cine como un método comercial (cine “hollywoodense”) nos enfocaremos en la parte más personal que se encuentra aquí: el cine de autor. Por lo general, los directores que se clasifican aquí son aquellos que logran dejar su huella en cada filme que dirigen, con esto se quiere decir que el espectador sea capaz de reconocer la obra de este director, analizando los pequeños detalles que se encuentren allí. Un claro ejemplo de cine de autor es el director y guionista Terrence Malick, uno de los directores más nombrados por el juicio estadounidense, quien con su asombroso talento nos muestra a través de sus filmes su particular visión del mundo, para transmitir en nosotros más que una imagen, una fuerte relación entre Dios, la naturaleza y el hombre, a partir de una narración poética entre hermosos fotogramas y la historia tratada. Con influencias hacía la teología contemporánea y mestiza, le da gran importancia a la expresión de la fe católica en sus filmes que termina volviéndose un verdadero acontecimiento en medio de los reconocidos y aclamados autores que hoy viven.

Este reconocido director nacido en Waco Texas el 30 de Noviembre de 1943, pasó su infancia viviendo en una granja en Austin donde estudió en el colegio St. Stephen’s High School. Más adelante, siguiendo su camino de buen estudiante, este autor entró a estudiar Filosofía en la Universidad de Harvard; habiéndose graduado este autor decidió estudiar en el Magdalen College de Oxford pero esto no duró mucho, puesto que decidió retirarse antes de terminar su tesis. Aun así esto no fue un impedimento, ya que luego de esto se dedicó a ser profesor de filosofía en el MIT, entretanto se ocupaba de ser periodista free lance en sitios como el New Yorker donde empezó a desarrollar su interés en el cine como una forma de ver el mundo y fue en ese entonces donde tomó la decisión de estudiar un Máster en el American Film Institute. Posteriormente, en los años 70’s trabajó como guionista en algunos largometrajes aunque fue en 1973 donde se empeñó en el área de dirección, producción y guión con la película “Malas Tierras” el cual tuvo un gran éxito, poniendo al joven Malick en el radar de la crítica cinematográfica; poco después en 1978 sacó su segunda película llamada “Días del cielo” la cual ganó La Palma de Oro y el premio a Mejor Director, esto llamó mucho la atención de los críticos.

En 1998, luego de un largo periodo de tiempo, Terrence reaparece con su filme “La delgada línea roja”, un total éxito el cual le dio 7 nominaciones al Óscar y ganó en el Festival Internacional de cine de Berlín (tal reputación que ha había construido en este poco tiempo le dio la oportunidad de tomarse veinte años entre una película y otra). Unos años más tarde, el director texano saca su cuarto largometraje “El nuevo mundo”, fue nombrado como una de las mejores filmes de la década (2000-2010) según la revista Cahiers du Cinéma España. Recientemente, en el 2011 estrenó su última película “el árbol de la vida” la cual ganó una Palma de Oro en Cannes, se dice que esta última es una especie de semi-biografía puesto que él también sufrió la muerte de su hermano a una edad muy temprana, lo cual marcó su familia y por supuesto a él mismo. Además de esto, es importante señalar el constante uso de paisajes y espacios rurales en las películas mencionadas, se debe a la infancia que tuvo el autor creciendo en una granja, y siempre ha tratado de mostrar la cercanía y la belleza de estos lugares de manera artística.

Antes de avanzar, es importante recalcar que en las películas anteriormente mencionadas se encuentran similitudes en cuanto al mensaje que buscan transmitir, recordando que los intereses de Terrence combinan tanto la filosofía como teología católica en todos los filmes, en cuanto al conflicto (vacío) existencial por el que pasa el hombre, en relación con Dios y la naturaleza y cómo finalmente esta interacción con la naturaleza consigue conectar al humano con Dios, y es aquí cuando por fin logra apreciar la belleza del mundo, tal vez también es por esto que en todos sus filmes hay niños en el reparto, para mostrar ese toque de inocencia para establecer de manera más clara el punto que trata de mostrar. Queriéndonos decir, a través del manejo de la fotografía, planos, y movimientos de plano cómo acercarse a la naturaleza es estar más cerca de Dios. Pero esto lo trataremos más adelante.

Para empezar, hablaremos de tres de los cinco largometrajes que ha hecho este autor, “La delgada línea roja”, “El nuevo mundo” y finalmente “El árbol de la vida”. Por lo general la estructura de una película está conformada por tres actos principales, la introducción, donde se muestran a los personajes a tratar durante la historia, luego viene el segundo acto donde se ve el primer giro en la historia a tratar y además como los diferentes personajes ya introducidos se relacionan y por último el tercer acto dónde se establece el climax del filme y cómo ésta termina con la resolución del problema. Ahora bien, al hablar de las película de Terrence Malick podemos encontrar un cambio en la estructura que normalmente se utiliza, si analizamos las película anteriormente mencionadas podremos notar que los dichos actos de los cual hemos hablado no se muestran de manera evidente como tal vez en otras películas podría verse, esto es porque efectivamente (en especial “El árbol de la vida”) no siguen tres actos definidos, ya que lo que realmente le importa a este director es esa mirada que le impulsa a dejar libremente a todos sus relatos en el vacío y a dejar que la cámara se guie por la contemplación de las cosas.

Por ejemplo La delgada línea roja (1998) que tiene una duración de 163 minutos, trata de una historia de guerra donde transforma de manera significativa a los soldados de este pelotón, los personajes que identificamos son el primer sargento Edward Welsh (Sean Penn), soldado Witt (James Caviezel), el soldado Bell (Ben Chaplin), Capitán Charles Bosche (George Clooney), Capitán John Gaff (John Cusack), Coronel Gordon Tall (Nick Nolte), Para traer un poco más de contexto al asunto debemos aclarar que el argumento presentado aquí es en 1942 la II Guerra Mundial, un grupo de hombres pertenecientes a la compañía de fusileros del ejército "C de Charlie"

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