Dragón Medieval Es Muy Fuerte

“El hombre y la serpiente”

Ernesto Vázquez Fonseca

En una parte del bosque, una serpiente atrapada bajo una roca. Aparece el hombre

Serpiente (angustiada) auxilio, auxilio, socorro, socorro, ayuda, ayúdenme; ayúdeme buen hombre

El hombre se acerca a la serpiente y la mira asombrado

Hombre ¿yo?

Serpiente (suplicante) por favor, ayúdeme

Hombre (dudoso) ¿pero y si te la quito y luego quieres comerme? No, no, mejor mejor me voy

Serpiente (rogando) pero como crees que yo sea tan malagradecida, si me estás haciendo un gran favor, yo no te pagaría comiéndote. Lo prometo por diosito lindo que no voy a hacerte ningún daño, seré tu más humilde sirvienta, te serviré en lo que quieras, seré una arrastrada por ti, te alabare, te bendeciré, por los siglos de los siglos…

Hombre (decidido) amén.

Serpiente (rogando) si, ¿verdad, verdad que me vas a ayudar?

Hombre (decidido) bueno, solo porque ya prometiste que no me comerías

El hombre toma la roca y la empieza a empujar para que pueda quedar libre la serpiente, ésta, en el momento de quedar libre se le echa encima

Serpiente (amenazante) ahora si te voy a comer

Hombre (enojado) rastrera, lengua viperina, si me prometiste que no me ibas a hacer daño

Serpiente (burlona) ja, ja, ja. Como te vas a confiar de una culebra. Que ingenuo eres, ja, jaja…

Hombre (aterrorizado) tengo hijos, esposa, padres…

Serpiente (egoísta) a mí eso me importa poco. Te comeré

Hombre (suplicante) por favor serpiente, dame una oportunidad, yo te ayude. Dámela por favor

Serpiente (intrigada) ¿Qué clase de oportunidad quieres?

Hombre (alegre) ¿Qué te parece si le preguntamos a los tres primeros animales que pasen, que opinan? Si están de acuerdo contigo en que me comas, me comerás sin que yo me resista

Serpiente (enojada) yo no veo a nadie por aquí, mejor te como

Hombre (esperanzado) espera, ahí viene una gallina, llamémosla.

Serpiente (altanera) hey, tu, gallina ven para acá

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