EXO Y La Torre De Los Filósofos De La Encliclopedia

La ensordecedora monotonía de la música rodeaba todo el lugar, las personas bailando pegadas unas a las otras era tan rítmico, sujetos tocándose el uno al otro era más que seductor. Pero ahí estaba yo en la gran barra solo, esperando que mis amigos pudieran acordarse que aun existo.

Mire hacia ellos para encontrarme que Jasón, un tipo alto y escuálido, mantenía presionada su pelvis contra la de su novio, si era homosexual. Últimamente ser gay es tendencia, no me refiero a que todos se vuelvan preferente a un sólo sexo de la nada por ser algo que incluso ahora se dio a conocer sin ser excluido, pero es porque a la mayoría casi no le importa lo que piensen de ellos ahora. Yo sin embargo me considero “sexo sin especificar”, me gustan las chicas pero a decir verdad siento como si me auto estancara de mis gustos, para caer bien a la gente o bueno solo a la gente que me agrada.

El fuerte retumbo de una botella caer me saco de mi ensoñación dirigiendo mi perspectiva al mesero que estaba teniendo una pelea con un hombre gordo y quizá rico, regrese a mi vista hacia la pareja y mire como conectaban en un beso mientras Oliverio abrazaba fuertemente a Jasón pero también pude fijarme como tres personas miraban directamente hacia ellos, susurrándose el uno al otro. Uno de ellos miro hacia mí y luego desvió su mirada como si fuera poca cosa, aunque creo que con la poca iluminación pueda mirar los bello que soy.

Acomodándome en el taburete mire mi reflejo en el gran espejo que estaba arriba de mí, cabello alineado a si el lado izquierdo, anteojos rectangulares…omg Maury es poco sexual.

—¡Maury! Pedazo de bizco, te estoy hablando—mire hacia la voz para encontrarme con este idiota a lado del marginal de su novio.

—Figúrate que pensé que me estabas mirando con deseo sexual, ok no.

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