Reseña del cuadro Morning Sun.

Facultad de economía

Competencia comunicativa (02)

Lic. Olga de León

Alumno: Miriam Sofía Charles Larriva

1719559

La obra de arte Morning Sun del pintor Edward Hopper es un claro ejemplo del modernismo norteamericano fusionado con el estilo propio del artista, el cual plasmaba en la mayoría de sus cuadros la soledad del ser humano siempre acentuando la luz y los contrastes con un estilo inconfundible.

En la pintura podemos observar a una solitaria mujer que porta un corto vestido color melocotón que combina con su blanca piel, se encuentra sentada en su casi impecable cama, de perfil en su ascético cuarto de lisas paredes, mirando hacia la ventana que aparece frente a ella; su posición es de descanso y al mismo tiempo de intranquilidad. La luz proveniente del exterior abarca gran parte de su ser, luce como si estuviera tomando un baño de sol, como si ella estuviera entregándose a éste. La perspectiva que la ventana nos da del exterior es muy angosta, lo único que se puede apreciar es la parte superior de un edificio y un cielo completamente celeste. También se puede deducir la presencia del atardecer o el amanecer debido a los colores cálidos que se plasman en el lienzo, en especial el ligeramente naranja del rayo de luz que entra por la ventana. El cuarto de la mujer se encuentra en una locación alta en comparación del otro edificio que se puede apreciar, aunque no se puede cerciorar de lo que la mujer esta viendo, se puede suponer que tiene vista ambigua. Las expresiones faciales y corporales de la mujer son de tristeza, como si ella no disfrutara lo que ve, o probablemente también como si ella extrañase lo que tiene frente a sus ojos.

La pulcritud de la imagen resalta mucho, tanto la apariencia de la mujer que abarca desde su cabello hasta su delicada postura, como la limpieza casi perfecta de la alcoba, crean una armonía deleitante para la vista.

Las pinceladas de la obra son cortas y poco definidas, se usa una gran variedad de tonos para los colores evitando la monotonía y el contorno de las imágenes tiene un pequeño grado de difuminación. A pesar de que el cuadro ofrece un panorama realista, hay un poco de exageración en los contrastes y la paleta de colores es extremadamente vibrante, factor que puede desviar la realidad. La interacción entre la luz y la sombra y su relación con el plano, es lo que mayormente resalta del cuadro, la técnica que usa el artista con éstas hace que la escena resalte y al mismo tiempo se combine con las figuras y personajes presentes. Los elementos de composición son balanceados y planteados exquisitamente en esta obra de arte.

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