Costos.

Hoy en día las exigencias del cliente cada vez son mayores en cuanto a calidad, servicio y precio; es por ello que las tendencias mundiales que actualmente rigen el campo empresarial reconocen que contar con información de costos que les permita conocer cuáles de sus productos o servicios son rentables y cuáles no, las lleva a poseer una ventaja competitiva sobre aquellas que no la tienen, pues con dicha información la dirección puede tomar decisiones estratégicas y operativas en forma acertada.

En base a esto, la fijación de precios va reflejada en función de los clientes, la competencia y los costos. Pero, ¿Cómo lograr este objetivo?, ¿Cómo determinar un precio justo?, donde garantice que el cliente adquirirá el producto a un precio que justifique el costo. Dado un determinado nivel de precios en el mercado, lograr la mayor utilidad implica fijar un costo como objetivo, para lo cual es necesario hacer uso de diversas herramientas, instrumentos y metodologías a los efectos de una mejor medición, control, seguimiento, análisis, planificación, asignación y reducción de costos.

Existen distintas herramientas que permiten el sistema de mejora continua, para la implementación de precios objetivos y costeo objetivo, se debe llevar a cabo una serie de pasos, inicialmente desarrollar el producto, escoger un precio objetivo, determinar un costo objetivo y por ultimo dentro de estas se encuentra “Kaizen” (mejora continua, gradual y ordenada) y consiste en asumir una cultura de mejora continua sostenida, que se centra en la eliminación de los desperdicios y despilfarros en los sistemas y procesos de una organización; al igual la implementación de la ingeniería de valor que se define como un sistema en el que se analizan y aplican medidas correctivas a un bien o servicio en el cual se busca maximizar los recursos y disminuir los costos de producción manteniendo su funcionalidad, calidad y confiabilidad inicial o mejorándolas; sin dejar de lado las expectativas del cliente.

En este contexto, la palabra costo no implica recorte de costos, sino gerencia de costos. Esta gerencia relaciona la evolución del uso de herramientas que permitan la disminución de costos, así como la de obtener un producto, en tal caso, se hablaría de técnicas como la ingeniería Inversa, que comienzan a ser una de las medidas tecnológicas para construir un producto; determinando su competencia, que objetivo se quiere lograr y cuál será su costo.

Así como lo reseña Carlos Fernando en su artículo de Fijación de Costos “Un producto no es fabricado a menos que la compañía esté razonablemente segura de que los clientes querrán comprarlo, al precio proporcionado por la compañía y que le rendirá a ésta una adecuada utilidad”. En función a esto, el costeo objetivo es tan solo un enfoque, para determinar qué objetivos

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