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LEY 43 DE 1990 FÈ PUBLICA DEL CONTADOR PÙBLICO

Vivimos en una sociedad cambiante enfocada casi plenamente a la parte económica, con grandes avances tecnológicos y científicos que determinan un nivel y calidad de vida debido a esta continua y afanosa forma de superación y trabajo que construimos y soportamos día a día, la contaduría pública cuenta actualmente cuenta con una relevancia en todos los sentidos de nuestra realidad. Así al pasar de los tiempos la importancia adquirida por esta se ha incrementado adoptando grandes papeles y adquiriendo una estructura y desempeño más formal, controlado en toda su amplitud.

Hoy en día el contador público es una ficha clave para la sociedad, y no es solo por ser el profesional que emite informes sobre la situación financiera en los cuales se basan las decisiones de los empresarios, inversionistas, acreedores y del Estado acerca del futuro de dichos entes económicos sino porque tiene una responsabilidad social enorme que es la de dar FÈ PUBLICA al igual que el notario, el sacerdote, el médico y el testigo, el contador público debe asumir un compromiso social que le exige actuar con ética y transparencia.

Además de ser una cuestión de Ética, el punto de vista contable, sino que debe verificar y emitir juicios basados en la comprensión de hechos reales para evitar caer en el error de hacer aseveraciones a la ligera o en beneficio de terceros sin temer mucho fundamento, análisis o verificación, es decir, que debe tener la plena seguridad de que el hecho del cual da fe es verdadero y comprobable por medio de evidencias que el mismo debe poseer, De esta manera se garantiza no cometer errores involuntarios que atenten contra la confianza ni correr el riesgo de violar la fe publica en su fin fundamental que realmente es la sociedad.

Dar fe pública no es una cuestión de hacer o no hacer, ni de reemplazar lo falso por lo verdadero, ni de destruir o alterar un medio de prueba, ni de decir lo que no es verdad pero que se afirma como verdad, dar fe pública transciende mucho más allá de eso, y su verdadero sentido es la responsabilidad que pesa sobre la conciencia y honorabilidad a través de un acto comprometedor y sancionable en el que la sociedad comercial y civil le exige al contador público un comportamiento ético, moral y ejemplarizante.

Teniendo en cuenta esto, es necesario definir fe pública para comprender la importancia de ser depositario de la confianza de la comunidad, “La fe pública es la garantía que el Estado da en el sentido que los hechos que interesan al derecho son verdaderos, auténticos. Lo anterior, porque en la realidad social existen una serie de hechos y actos con relevancia jurídica que si bien todos los ciudadanos no pueden presenciar deben ser creídos y aceptados como verdad oficial.

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