ENDEUDAMIENTO

II. ENDEUDAMIENTO.

El Endeudamiento es una variable de principal trascendencia para los acreedores, toda vez que se orienta a determinar la proporción de los aportes de los socios frente al nivel aportado por los acreedores. Y adicionalmente, se orienta a determinar el saldo residual que quedará del activo, en caso que la empresa debiese liquidarse y que representaría la protección de los acreedores para la recuperación de sus créditos. En función de lo anterior, los acreedores prefieren empresas que mantengan un bajo nivel global de endeudamiento (situación que aumenta la protección de sus créditos). En cambio, los propietarios prefieren políticas más liberales, que les signifique comprometer recursos propios relativamente limitados, obteniendo utilidades adicionales por el uso rentable de recursos terceros. Los efectos de niveles adecuados de endeudamiento son proporcionar buenas bases para la negociación frente a acreedores actuales y/o potenciales. La administración busca normalmente un equilibrio entre la rentabilidad adicional que pueda obtener el patrimonio a consecuencia de un elevado endeudamiento, y la capacidad de negociación que deseen tener para la obtención de nuevos créditos, sin desestimar el “costo-imagen” que les significará presentar una solvencia deteriorada. El endeudamiento debe analizarse estrechamente con la liquidez, por cuanto la fluidez de la generación de fondos para amortizar créditos de corto plazo disminuye (al menos circunstancialmente). Otra situación que es necesario considerar es que la diversificación de las fuentes de créditos, si bien pueden pensarse que es un hecho positivo para una empresa financieramente sana, una empresa en una situación delicada podría generarse un problema adicional, puesto que para la empresa es más fácil negociar volúmenes importantes de crédito con pocos acreedores, que cantidades de significación menor, pero con acreedores múltiples.

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