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Ensayo: Patente de la panela

Lina Maria Gutierrez Caycedo-89802

Desde mediados de septiembre se presentan debates en el senado respecto a la patente de la panela en el cual no solo se discutirá ese procedimiento, sino la crisis del sector panelero.

Esta patente fue pretendida por uno de los accionistas del Grupo Riopaila, lo cual significa que la tradicional manera de producir panela sería de exclusividad del dueño de la patente, situación que acabaría con la producción panelera nacional y con ello con un alza en el desempleo ya que la industria de la panela en el país es un importante sector que brinda empleos directos a más de un millón 700 mil personas, favoreciendo a más de 450.000 familias a lo largo y ancho del país, los gremios paneleros indican que su actividad se vería amenazada en caso de aprobarse estas patentes.

Sin contar que la producción panelera proviene de los pequeños campesinos, las explotaciones a gran escala, es decir, con extensiones de tierra superiores a 50 hectáreas, suponen apenas un 5% de la producción total.

Según el espectador explica: “el mercado a nivel mundial ha aumentado significativamente en los últimos años. El trabajo de los productores paneleros ha ocasionado el crecimiento de las exportaciones; solo entre enero y julio de 2019, se presentó un aumento del 40% pasando de 3.503 toneladas a 4.911, representado en 1,7 millones de dólares, de acuerdo con cifras de Fedepanela”.

Aunque hallan ventajas de la patente de la panela como lo son:

• Facilitar la comercialización, siendo un excelente argumento de venta y marketing.
• Puede servir como aval para obtener financiación.
• Previene conflictos con terceros por infracción de derechos anteriores.

Sería un error afirmar que todo ello surgiría a favor de la patente, ya que al facilitar la comercialización del mismo solo se vería beneficiada las grandes empresas como lo es Riopaila sabiendo que la misma generaría ganancias para ellos mismos y dejando en ascuas a sus paneleros, que antes la producían y deja de tener valor su trabajo.

Contando que su comercialización siempre ha sido algo exequible para todos, al ser patentada esta se verá simplemente como un lujo y un producto más de estas empresas se sabe que siempre se buscara el beneficio propio, pero los paneleros que la tratan también se verían afectados no solo por la caída económica que tendría este si no que es a lo único que ellos pueden acceder y sustentarse siendo así una competencia desleal y una perdida a la explotación de las tierras mostrando también su pérdida de valor.

La panela es milenaria, y con esta jugada de un industrial pone en dificultades a los paneleros colombianos, donde de ser autónomos de su producción y comercialización pasarían a ser un monopolio de una fórmula en cabeza de un empresario, a quien seguramente debían pagarle unos derechos para producir su producto. Perdiendo de esta manera el proceso tradicional en la fabricación de este producto dándole al dueño de la patente el derecho de cobrar por el uso de su invento por parte de terceros.

Esta patente tiene como fin producir una panela superior a la de los paneleros artesanales poniéndolos en desventaja, evidenciando su competencia desleal y mostrando lo poco equitativo que esto es. Aquí en Colombia los pequeños se han dedicado a la panela y los grandes al azúcar, pero con esta patente, de nuevo los grandes se quieren meter con los chicos, los paneleros.

Para finalizar, patentar la panela es tan absurdo como patentar el café o las rosas, como lo dijo el representante Fabián Díaz. actuar en defensa de los paneleros ante la Superintendencia de Industria y Comercio. También en las instancias internacionales para que esta desleal solicitud de los industriales se rechace por la defensa del empleo de los pequeños, y de la Colombia rural le debe corresponder al MinAgricultura.

Referencias

https://www.elespectador.com/noticias/politica/supuesta-patente-de-la-panela-a-debate-en-senado/

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