Marketing

MARKETING FRONT–END

El marketing front–end se refiere a la parte más ancha del "embudo de ventas" y consiste en captar la mayor cantidad de clientes potenciales para convertirlos en clientes reales.

Hay infinidad de técnicas disponibles, limitadas únicamente por los recursos y la imaginación.

El objetivo es mostrarse, como marca, llamando la atención del cliente en potencia, entrando en su mente por medio de la vista y/o el oído principalmente, y provocando cierta curiosidad por el nombre, la marca, el producto o el servicio, produciendo que este busque, consuma y comente lo que se le ofrece; una vez establecido el primer contacto, está relación sigue evolucionando hasta llegar a la parte más estrecha donde entra en juego la parte del back–end.

El embudo de marketing controla la conducta del consumidor desde un sentido amplio a uno más estrecho. En el extremo ancho del embudo, los consumidores toman conciencia de marcas específicas. Pronto se ponen cómodos y familiarizan con la marca y empiezan a desarrollar opiniones. Los consumidores comienzan a sentir que la marca se ajusta a sus necesidades moviéndose hacia el extremo estrecho del embudo donde seleccionan un producto en particular. En el extremo del embudo, los consumidores compran el producto.

Convencerles de que merece la pena establecer relaciones con nuestro negocio. Esa relación se hace mas fuerte a medida que los clientes consumen más de la información gratuita que ofrecemos, compran productos front-end y aprenden a confiar y apreciar lo que proporcionamos. A partir de ahí, entran en el back-end donde se realizarán ventas con elevados margenes a los clientes hiper-receptivos.

Los medios utilizados para que sean efectivos, deben responder a las investigaciones de la rama de la neuro ciencia llamada neuro marketing.

En los estímulos auditivos, la música rítmica, muy melódica y con un tempo rápido funcionan bastante bien; las voces alegres, amigables y sensuales resultan atractivas, los tonos dulces y profundos con un ritmo fluido y ligero, modulado y animado estimulan positivamente al cerebro, la intensidad y el volumen de la voz, la velocidad y la variación de entonación al igual que la duración de las sílabas influyen, sin duda, en la mente.

La repetición del nombre, la utilización de palabras claves, provocar curiosidad utilizando frases, los juegos de palabras, las rimas, las metáforas, las asociaciones o comparaciones y el humor son algunos recursos utilizables.

En el medio visual el espectro se amplía con aspectos como la teoría del color, las reglas de composición, las tipografías, la semiótica, la fotografía, la iconografía, etc. y cada área con una profunda cantidad de conocimientos

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