NORMAS DE AUDITORIA GENERALMENTE ACEPTADAS

NORMAS DE AUDITORIA GENERALMENTE ACEPTADAS

Cuando hablamos de las Normas de Auditoria Generalmente Aceptadas (NAGAS) pensamos en los principios fundamentales de auditoría, con los cuales esperamos que nos garanticen el cumplimiento de calidad del trabajo profesional, teniendo en cuenta que estas normas son obligatorias para los Contadores Públicos que ejercen la auditoría en nuestro país, así mismo como ejemplo podemos ver que con una tarea, existen varias ideas para desarrollarla, esto nos lleva a que el solo hecho de que todas las empresas están aplicando las normas de auditoría generalmente aceptadas, y de que se aplique todo el proceso y se relacionen básicamente con la conducta funcional del auditor como persona humana que regula los requisitos y aptitudes que deben reunir los auditores durante un proceso de auditoria, por eso se está evaluando su desempeño para que el cumplimiento de estas normas confirmen la calidad del trabajo del auditor, además de que están también verificando que la información tanto administrativa como operacional que se está generando es en realidad confiable, veras y oportuna y como complemento nos está sirviendo como parámetro de medición a los estudiantes y como guías orientadoras de conducta por donde tendremos que caminar cuando seamos profesionales.

En esta norma también podemos descubrir que no sólo basta con ser Contador Público para ejercer la función de Auditor, sino que además se requiere de tener un entrenamiento técnico adecuado como auditor; Ya que adicional a los conocimientos obtenidos con los estudios universitarios, también se exige la aplicación práctica en el campo con una buena dirección y supervisión. Con la que nos da a entender que con esta capacitación, la práctica y la constancia formaremos en realidad lo que es el auditor, ya a base de la experiencia acumulada, podemos encontrar a alguien en condiciones de ejercer la auditoría como especialidad. O al contrario, alguien que negara su propia existencia por cuanto no garantizará calidad profesional a los usuarios.

Por ello se requiere entonces objetividad imparcial en la actuación profesional. Si bien es cierto, la independencia de criterio es una actitud mental, como auditor no solamente debemos ser, sino también parecer, es decir, cuidar nuestra imagen ante los usuarios de su informe, que no solamente es el cliente que nos contrató sino también los demás interesados como lo son (bancos, proveedores, trabajadores, estado, pueblo, etc.).

Por otro lado por la gran importancia que le hemos dado al planeamiento en los últimos años a nivel nacional e internacional, hoy se concibe como un proceso de trabajo al que se pone mucho énfasis, utilizando el enfoque de "arriba hacia abajo", es decir, no deberíamos iniciar revisando transacciones y saldos individuales, sino tomando conocimiento y analizando

...