Acoso Escolar-Bullyng

INTRODUCCION

Hoy se es muy conocido el acoso que se propicia entre niños, gracias a que tanto victimas como agresores han hablado respecto al tema, y la cual hoy en día es algo que marca al niño y a su entorno.

El acoso escolar procede del maltrato, el acoso, hostigamiento y también la intimidación la cual ha existido siempre. Este círculo vicioso de la intimidación se da gracias a los niños están reflejando la violencia que se ve, se escucha, que aprenden y viven, pues al ver el festejo que propicia, aprenden a relacionarse con agresividad hacia los demás y cuando crecen estos repiten ese patrón.

La intención del texto es saber cómo podemos detectar y abordar uno de los problemas más frecuentes que vemos hoy en día como es el acoso escolar, el cual, no es otra cosa que no conozcamos, solo que conforme el tiempo paso se le ha dado otro tipo de nombre y el cual está de “moda”. La diferencia que hay ahora es que podemos detectarlo con mayor facilidad, conocer las causas, entender cuáles son las consecuencias y más que nada como ayudar a resolverlo.

La violencia, mayormente trae de raíz el rencor y el resentimiento social, y que es algo que se aprende, es una forma de vida, un HABITO que se aprendemos desde temprana edad.

El nuevo término que se le da a este viejo problema, en el cual nosotros hemos presenciado o simplemente hemos sido parte de el en donde alguien se siente superior, fuerte o listo que otros molesta a compañeros por razones inexistentes no son otra cosa que la intimidación.

Patricia Ibarra (bullyng en primaria, 2013) hace referencia a que el 25 por ciento de los alumnos de primaria en México han sido o son víctimas de acoso escolar.

Uno de los principales aspectos de la víctima es que se siente inseguro en ciertos lugares ya que aquello que era lo principal o lo más importante como el aprender, los amigos o familia, después se tornan pequeñeces y pasan desapercibido para el niño.

Hay que destacar que así como muchos investigadores señalan, tenemos que tomar en cuenta que las víctimas se llegan a sentir tan impotentes ante el no poder poner fin a la situación, que también pueden convertirse en agresores en algún futuro, ya sea para desquitarse por lo que sufrió o porque nadie lo ayudo con el problema.

Debemos aprender a diferenciar que es y que no es el acoso, porque no todas las agresiones o violencia debe ser considerada como acoso escolar, ésta se considera pero cuando el comportamiento agresivo es intencional y busca dañar a la otra persona, ese comportamiento es repetitivo y puede durar días, semanas, mese o porque no, también años, para que se considere como un acoso.

No todo el acoso es agresión física, hay otros tipos de violencia que pueden lastimar de peor manera los cuales son:

• Verbal (insultos, amenazas, burlas, apodos)

• Social (exclusión, discriminación)

• Psicológico (espiar, gestos y desprecios contra la victima)

• Físico (no solo golpes, también robar o esconder cosas de la victima)

Podríamos llamar síntomas a las frases como “no quiero ir a la escuela”, “estoy enfermo” o incluso la misma desconcentración en los estudios que puedan provocar bajo rendimiento escolar en dichos niños.

Se puede describir al agresor como el más fuerte, ya que como lo describe Patricia Ibarra (bullyng en primaria,

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