En Jaulas De Tigres

En jaulas de tigres

La lectura hace una reflexión sobre la historia de los psiquiátricos en México, donde podemos observar cómo es que funcionaban estos lugares. La redacción es muy digerible y tal vez un poco adornada, pero no niego que en las instituciones mentales existiera una negligencia así como una gran falta de capacitación en el personal, un mal manejo de los espacios, como la falta de un modelo que en realidad diera resultados.

Una parte que no me agrado fue que no indagó sobre cómo era educación en las facultades de medicina/psiquiatría que existían en México en ese entonces, ya que podría darnos un hincapié sobre qué argumentos, métodos, modelos, equipos se usaban para la mejora de estas personas. Sin embargo me parece interesante lo que hace al describir de una forma muy detallada (aunque en partes parece exagerada) la forma de cómo son tratados y que tipos de cuidados recibían.

Pero a mi punto de vista hay 3 puntos que me gustaría resaltar: primero el cambio de nombre de hospitales psiquiátricos a granjas-hospitales; los parámetros con los cuales es que son medidos las personas para llegar esos lugares, los métodos utilizados y la experimentación con fármacos en fase de pruebas.

Primero con la llegada de la modernidad se esperaba poner a México a la vanguardia y la moda eran los psiquiátricos. Mismo que se instauran en México con Porfirio Díaz pero desgraciadamente la falta de conocimiento y la gran ignorancia que vivía el país no dejo que estos lugares estuvieran preparados y condicionados para albergar gente con “problemas mentales”. Ordaz inaugura las granjas y aunque tenía buenas intenciones, y tal vez un modelo que funcionara, no contaron con que la misma gente que laboró antes en La Castañeda llegaba a estas granjas con las mismas técnicas, lo cual no permitió que se aplicaran otros métodos o modelos.

Actualmente las técnicas o parámetros para poder clasificar si una persona padece o no de algún daño en sus facultades mentales son muy cuestionables, incluso hasta qué grado llegan a depender de los intereses de unos cuantos. En el texto habla que en estas granjas había un gran número de pacientes, sin embargo solamente unos pocos tenían razón de estar ahí. Esto se da por diferentes situaciones que van desde: familiares que no quieren a los enfermos, prostitutas, niños huérfanos, hasta cosa más graves como lo eran los malos diagnósticos de médicos negligentes o alborotadores que el gobierno quería esconder. De los métodos ¡ni hablar! Llegan a un grado de salvajismo (por esto así hincapié sobre la educación en México en las facultades de medicina para poder saber a qué responde esto) al grado de llegar a encerrar a personas dentro de jaulas ¡como si fueran animales! con un gran desinterés por parte del personal que además, no tiene la preparación,

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