La Percepción Activa, Percepción Analítica Y Concepto De Supersigno

La percepción activa, percepción analítica y concepto de supersigno

Domínguez Enrique al definir el modelo que se va a emplear establece dos fases teóricas que ayuden a la asimilación de la realidad; La primera fase teórica se le denomina como “percepción global” mientras que a la segunda se le denomina como “percepción analítica”. Estas dos fases completan lo que el autor denomina la entrada de datos.

La percepción analítica podría ser visualizada como una sucesión de percepciones globales que surgen desde nuestra propia voluntad y ayudan a conocer lo que se analiza por el sistema visual con un mayor detalle, siendo así un proceso con una alta rigidez de nuestra voluntad individual, poco podrá ser generalizado, es por esto que el autor menciona -La Lectura- de la imagen y la da a entender como un encadenamiento de percepciones que concluyen en la obtención de una información acumulada que va más allá de la percepción global.

Esta idea de lectura sugiere que quien crea una imagen pretende expresar algo y es el espectador quien busca darle, por añadidura, un complejo significado o una cierta decodificación.

Teniendo en cuenta a Marr y Frisby quienes mencionan que nuestros órganos visuales traducen nuestro campo visual en retículas de pixeles, el autor no busca desmentirlos y añade que de igual manera la tradición gestáltica busca responder los fenómenos observados que pasan de una fase inicial y esta va sujeta a la voluntad del individuo.

Domínguez se remite a A. Moles y nos dice que toda obra artística busca transmitir información a quien la contemple y que en definitiva se tendría que tener en cuenta cuatro fases que serían:

- Fase de emisión

- Fase de recepción

- Decodificación

- Asimilación

Estas fases según el autor llevan a una formulación en la cual no se toma en cuenta que el hombre puede elegir entre asumir un rol pasivo activo y que de esta manera se podría alterar el proceso de captación de un mensaje.

El autor habla sobre las cualidades que tiene el mensaje estético que puede resultar inevitable acudir a este ya que se ha optado por adoptar un modelo determinado, suponiendo así que el hecho artístico se contemplara hoy en día de una manera distinta.

En este punto Domínguez Henrique busca esclarecer el concepto de “supersigno” y hace uso de lo dicho por A. Moles quien lo define como un conjunto de signos elementales, que dentro de la memoria perceptiva se aceptan como un todo que es susceptiblea ser designado por un signo memorizante; remitiendo así al concepto de “buena figura” el cuál lleva a dos conclusiones:

• Para

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