MENSAJE DE FIN DE CURSOS

MENSAJE DE FIN DE CURSOS

Sres del presídium, padres de familia, queridos graduantes, público en general. Sean bienvenidos a esta ceremonia de clausura de ciclo escolar 2015-2016.

Un nuevo año académico cierra su larga agenda. Y en esta oportunidad, como no podía ser de otra manera, quiero destacar la excelente labor que han realizado los maestros, que pusieron lo mejor de sí para lograr que los alumnos de esta escuela pudieran aprender y crecer en un marco de convivencia armónica.

Vaya para ellos entonces, el reconocimiento a su labor, y mi más profundo agradecimiento por su excelente desempeño.

De igual manera quiero agradecer al personal administrativo, por el apoyo que siempre han brindado a la comunidad escolar la nuestra querida institución.

Permítanme ahora dirigirme a los setenta y siete alumnos que visten su uniforme de primaria por última vez, ya listos para levantar su vuelo...

Una despedida, cualquier despedida, suele ser triste. Una separación, después de un tiempo más o menos largo de convivencia, supone una suerte de pérdida que a nadie le gusta experimentar. Las despedidas producen sentimientos contrariados. De una parte, se trata de una separación después de seis años de haber compartido muchas horas de vida en común con amigos, alumnos y maestros. Pero, de otra parte, esta separación es también algo esperado, que ustedes y nosotros sabíamos que había de llegar, aunque es probable que ustedes la hayan deseado con más ganas que nosotros.

Ustedes han estado preparándose para la etapa de secundaria, y desean que ésta comience cuanto antes. Lo importante es que ese día ha llegado hoy, y mañana comienza para ustedes una vida distinta. Se ha cumplido un ciclo en su historia personal y comienza otro. Los sueños (o quizás, más bien, los desvelos) de sus padres y los de ustedes mismos comienzan hoy a tomar forma.

Quiero hacer un paréntesis

En nombre del personal docente y de apoyo, quiero expresarles a ustedes el mejor deseo de que esos sueños se cumplan y se vuelvan realidades. Sus familias y ustedes así lo merecen.

Pero nuestra mayor aspiración es, sin duda, que recuerden esta querida escuela, pero sobre todo, lo que en ella aprendieron (en forma de conocimientos, experiencias, destrezas y actitudes).

A ustedes, alumnos de sexto, queremos hacerles saber que a pesar de que este ha sido un año difícil, con algunos obstáculos en el camino, estamos orgullosos de ustedes, porque han logrado muchas cosas que parecían imposibles: ser responsables, tener obligaciones, asumir compromisos, y han aprendido a intentar cada día ser un poquito mejor.

Esperamos que lleven lindos recuerdos de esta escuela, por todo lo

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