¿Será posible la aceptación de las personas homosexuales?

¿Será posible la aceptación de las personas homosexuales?

Hipótesis:

Los adultos aceptan menos que los adolescentes a las personas con homosexualidad.

Objetivo general: al finalizar este trabajo, las personas interesadas en el tema de la homosexualidad, conocerán las creencias que se tiene, consecuencias y que tanta aceptación se está generando en la actualidad sobre el tema de la homosexualidad.

Objetivo específico: se espera que con este trabajo se llegue a crear conciencia en la población que lea, y participe en la aplicación de encuestas y entrega de trípticos sobre el tema de la homosexualidad.

Marco teórico:

     Aun en estos tiempos modernos nos encontramos en una discusión dividida sobre el tema de la homosexualidad, mas es una mayoría de la sociedad la que aun ve esto como un tabú, ya que es un tema del cual no se habla abiertamente y son las creencias irracionales las que le rodean. Esto causa una gran desinformación sobre la diversidad sexual, vemos este tema desde diferentes enfoques como puede ser la religión, lo social, lo cultural y lo psicológico.

     Dentro de este trabajo se abordara  lo sociocultural y psicológico, veremos cómo se ha transformado en cada una de estas áreas y se verá cómo influye en la opinión pública, ya que dentro de un mundo en evolución, este tema no se queda atrás pues también ha ido evolucionando la opinión particular y publica de cada grupo social.

     Se considera que la problemática se deriva de los planteamientos y estándares sociales que se tienen que seguir según la normatividad de esta.

     La palabra  homosexual proviene  del griego antiguo homo que significa igual’, y el latín sexus, ‘sexo’ y este se define como una atracción romántica, atracción sexual o comportamiento sexual entre miembros del mismo sexo o género.

     Se podría decir que el ser homosexual conlleva consigo estigmas de aceptación comenzando por la aceptación propia, el darse cuenta de que te gusta algo diferente que a los demás, el decidir vivir una vida cómoda consigo mismos o una vida llena de dolor, enojo e incluso rabia.

     Y no obstante con que el homosexual lleve con él una carga demasiado grande cuando son ellos los que desde el primer momento no se aceptan, la sociedad juega un papel muy importante; pues hablando al menos de la sociedad mexicana, en esta nos enseñan desde niños, por ejemplo que el color rosa es de niñas y el color azul es de niños, que los niños no lloran, las niñas deben de jugar a la casita y a la comidita y los niños deben jugar con carritos, pero ¿que pasa cuando los papeles se invierten?, o sea, que sucede cuando la niña deja a un lado las muñecas y la casita por jugar con carritos y al futbol y el niño quiere jugar con las muñecas o  la cocinita, se sataniza y de inmediato se corrige al pequeño (a) diciéndole que eso es de viejas, o que eso no es para niñas que las niñas deben de jugar a la cocina, a esos niños se les está obligando a tomar un rol que tal vez ellos no quieran o simple y sencillamente por curiosidad quisieron saber cómo era estar jugando ese juego de niña o de niño.

        Sigmund Freud habla sobre que la mujer lesbiana considera al hombre                           como su enemigo ya que la mujer envidia al hombre por su pene.

        El psicoanálisis también toma el tema del lesbianismo como un fracaso de la feminidad, el amor lésbico es una rebelión de la mujer contra las condiciones actuales de la vida sexual y erótica. No obstante el amor lésbico puede ser anulado en sus manifestaciones patológicas a través de la terapia y devolver a la mujer la dicha y gratificación que por sus condiciones de hembra le puede otorgar el intercambio amoroso con el barón (Cruz, 1981 pag.18).

    Pero realmente una hembra después de tomar la decisión de disfrutar su sexualidad de una manera diferente quiere y/o desea ser cambiada a lo que la sociedad, Freud y el psicoanálisis llaman “normal”.

    Se habla mucho de que el ser homosexual viene de que en la infancia se sufrió un trauma que genero una herida y como la persona que sufrió este abuso no lo vivió como tal, se dio cuenta de que ese momento traumático no resulto serlo así y por esto es que se vio y vivió como una persona homosexual.

     En la actualidad es muy común observar a una pareja de mujeres en la calle tomadas de la mano, mujeres vestidas y arregladas más varoniles que femeninas, en las universidades o en algún centro social,  estos nos habla de que existe un poco de apertura de la sociedad, pero no significa que sea totalmente aceptado pues no falta las miradas acusadoras o las palabras mal intencionadas que  señalan y catalogan a estas mujeres.

     Al igual que las mujeres, los hombres también cada vez se van sintiendo más libres de mostrar su verdadero yo, y andan más libremente por las calles de la cuidad, pero eso no significa que todo el mundo los acepte pues aún existen los pensamientos como “si aceptamos a los gay´s ellos van a estar sobre de mí”, “si defiendo la homosexualidad van a pensar que yo también soy así”.

     Aunque en los últimos 10 años ha habido cambios significativos para esta comunidad, como la legalización de las bodas entre personas del mismo sexo, que aun siendo una estrategia política, resulto ser un avance social importante, incluso en la religión con el Papá Francisco que abiertamente dijo “por qué se va a discriminar a las personas homosexuales, si dios dijo que debíamos amarnos los unos a los otros”.

    Aun con todos estos avances sociales se sigue creyendo que el amor solo se debe de tener entre un hombre y una mujer, para así poder reproducirse y dejar una huella en el mundo, pero realmente el amor no solo nace entre un hombre y una mujer, claramente tiene sus variaciones y esto no significa que el amor es igual a la reproducción y que la reproducción es igual a la afiliación que se tiene con esa persona que se ama.

     Estamos completamente de acuerdo que entre más aceptación personal y sexual  exista, más éxito tendrá la persona hetero u homosexual, en el libro ¿Qué me está pasando? (Madaras, 1983 pág. 215) nos habla de que en el periodo de la adolescencia y la juventud es muy normal que se tengan pensamientos, deseos o incluso experiencias homosexuales.

     Esto es parte del crecimiento y madurez como persona que se llega a tener al aceptar sus deseos e impulsos con responsabilidad de su ser y su cuerpo.

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