Amar al projimo

¿AMAR AL PRÓJIMO?

En algunas ocasiones nos hacemos una pequeña pregunta muy curiosa, ¿Por qué deberíamos amar a nuestro prójimo? La sociedad ha sido un poco imprevista en estas situaciones, vemos tanto dolor, sufrimiento, peleas, todo a causa porque hace falta un elemento tan fundamental que es el respeto. Bueno, y ahora ¿Qué es el respeto? El respeto es la forma de saber tratar a una persona con amor, valorando su esfuerzo y dedicación, pero ahora este elemento se ha vuelto tan desconocido para nosotros, muy pocos entienden la situación y la problemática que surge a diario en nuestro pequeño mundo. Un mundo tan desconocido y lleno de angustia, una sociedad egoísta que no es otra cosa que amor mal dirigido del uno al otro. Ahora solo amamos el “dinero” y los “placeres” cosas materiales que al tiempo se acaban, se llega a morir una persona adinerada y su dinero queda acá, sus lujos se pierden, solo su espíritu es el que si se lo lleva todo. Un mandamiento muy claro dice: “Amaras a tu prójimo como a ti mismo”, el amor primero lo encontramos en nosotros mismos, si aprendemos a amarnos, a valorar lo que tenemos por muy poco que sea. Somos una bendición todos, absolutamente todos la somos. De ahí nace el amor a la otra persona, el respeto por aquella persona dando lo mejor de nosotros, brindando nuestro cariño.

Al igual que el amor a Dios, el amor al prójimo no es solo un sentimiento, es la acción que practicamos a diario en nuestras vidas llevando una buena relación con los demás y mejorando la cotidianidad humana, “con un pequeño esfuerzo nace un mayor cambio”.

No solo debemos amar al que está en las buenas, debemos amar a nuestros enemigos, a esas personas con las que discutimos, personas que al igual que nosotros sienten y con un gran sentimiento que es el amor podemos transformar el mundo de todo aquel que lo viva y que tenga a Dios en su corazón dejando a un lado el odio, la intolerancia, la discriminación, las burlas. Con el respeto se puede mejorar un gran porcentaje de disgustos y se incrementará la alegría y las sonrisas de todo aquel que ame a su prójimo como así mismo. Aun en este diminuto planeta existen personas que poco a poco van generando un cambio muy positivo y que previamente el amor no acabara porque Dios permanece en nuestros corazones y si queremos sentirlo, solo ama a tu prójimo y no esperes nada a cambio. Deja que el tiempo y la verdadera justicia divina te recompensen con el milagro del cielo y la espiritualidad eterna.

“Siembra amor desde ahora, nunca es tarde, Dios tiene todo el tiempo para ti.”[pic 1]

CRISTIAN DAVID ANDRADE ROJAS  

11-A  J.M

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