CRISTIANOS TIBIOS

* ¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE SER UN CRISTIANO CALIENTE Y SER UN CRISTIANO TIBIO?

Un cristiano tibio no le interesa cambiar su estilo de vida; se siente comodo cómo esta. Conoce a Dios pero no lo involucra en su vida. Los tibios sufren porque saben lo que tienen que hacer pero no lo hacen

Ellos en realidad no desean la Palabra de Dios, para su crecimiento espiritual, no se mantienen firmes en la enseñanza ni en la comunión, ni tampoco en la oración . Ellos obedecen solamente en su propia conveniencia, la cual cambia constantemente – algunas veces caliente y otras veces fria.

Lo asombroso de los tibios es que no se dan cuenta del peligro en el que están. En su condición espiritual infeliz y ciega ellos piensan que no les hace falta nada. ¡Tan engañados están! que su necesidad de cambiar se esconde de sus ojos, no es su prioridad. Imagínese estar en peligro pensar que todo está bien.

• Más adelante en Apocalipsis 3:19 dice "Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete"

• El amoroso y paciente Señor no podía soportar más y dio su última advertencia. Los indiferentes y despreocupados tibios fueron forzados a tomar su decisión más importante, una decisión que afectaría el fin de sus vidas espirituales.

• ¡Jesús quería que ellos sean ardientes todo el tiempo! Aquí vemos que el amor de Jesús por los tibios le hará reprenderlos y disciplinarlos. ¡El no está tratando de echarnos de su familia, sino de mantenernos en su familia!

• Pero si nosotros persistimos en desobedecer, Dios nos dejará marchar hacia nuestra muerte espiritual.

• Y ya para terminar en Apocalipsis 3:21 dice "Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono." Nos habla sobre vencer la tibieza.

¿CÓMO ES EL CRISTIANO CALIENTE?

Los cristianos calientes se dejan guiar por el Espíritu Santo. Ponen a Dios en primer lugar y su ego en el último lugar. Desean cuidar los intereses de Dios y quieren ser como Jesús. – ganar almas para Cristo y que Dios cambie y controle su vida.

Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu” Gálatas 5:24-25. El Espíritu Santo hará la obra en nuestra vida, para ser libres, pero dejemos actuar al Espíritu Santo, si es que en verdad somos de Dios.

Ahora, pregúntate ¿Cuál es tu estado? ¿Eres frio, tibio o caliente? Si eres frio, acepta a Jesús, entrégate por completo a Él y déjalo que transforme tu ser. Si eres tibio, preocúpate y pídele perdón a Dios por causarle náuseas. Si eres caliente, ¡Gloria a Dios! Sigue así y brillarás como las estrellas del cielo.

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