Dios es Misterio y Autocomunicación

El estudio del Dogma de la Santísima Trinidad nos dice que Dios es Uno y trino a la vez, que se ha revelado en toda la historia de salvación y lo ha hecho plenamente en la venida de Jesús al mundo. Por eso podemos afirmar dos cosas que nos sirven para nuestra vida de fe: Dios es a la vez misterio y autocomunicación.

Dios es misterio. A Dios no lo podemos abordar plenamente en esta vida, ni agotar en nuestras experiencias de fe por más gozosas que nos parezcan porque Dios es más de lo que podemos imaginar o pensar (Ef 3,20). Por eso en nuestra relación con él requerimos de un mínimo de humildad para reconocer la limitación de nuestra condición humana y salir de nuestra tendencia autosuficiente a ser “diosillos” que pretenden conocerlo todo y dominarlo todo y que muchas veces tenemos una pretensión a prescindir de Dios. Y peor aún cuando pretendemos manipularlo a nuestra conveniencia, según antojos y necesidades. Luego a quienes decimos creer en este Dios uno y trino estamos llamados a tener una actitud de apertura y novedad porque Dios se puede revelar en libertad y gratuidad como quiere y como le parece bien según su designio de amor sobre nuestras vidas. En este sentido Dios es siempre novedad, sorprende y es creativo.

Dios es autocomunicación. Porque ha querido revelarse en la Persona de Jesús de Nazareth, en este hecho reconocemos a un Dios cercano, que busca al hombre para salvarlo y entrar en una relación íntima y cercana con él. Así que por la fe en Cristo nos encontramos en la posibilidad de conocer a Dios, que es la aspiración más profunda que encontramos en nuestros corazones. Nuestra fe cristiana trinitaria nos abre esta puerta. Tenemos un gran tesoro con respecto a otras religiones que están orientadas por la incognoscibilidad, trascendencia e inaccesibilidad de Dios. Para nosotros los cristianos Dios se nos da como Padre, como Redentor y como Santificador.

Es un reto para los cristianos aprender a vivir en esta paradoja de Dios que es misterio y a la vez autocomunicación.

Cristina

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