EL CUERPO DE LOS CONDENADOS
vengador_1713 de Noviembre de 2013
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EL CUERPO DE LOS CONDENADOS
En el desarrollo de la historia “el cuerpo de los condenados” de Michel Foucault este historiador de las ideas teóricas y filosóficas busca analizar la perspectiva humana frente a la justicia y el castigo, basándose en una historia que permite identificar la manera en que la víctima fue brutalmente torturado, descuartizado y desmembrado sin tener opción a defenderse ante la injusticia de los tiranos.
A fines del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX , se empezó a implementar una reforma, para poder cambiar la manera de castigar, ya que la que existía anteriormente solo mostraba un espectáculo en público al provocarle dolor a los que se pretendían castigar; por lo que fue necesaria crear dicha nueva reforma la cual planteaba un castigo por medio de la prisión, es decir privar la libertad , en donde se tuviera en cuenta un periodo de tiempo el cual se componía de una jornada que comenzará a las seis de la mañana en invierno, y a las cinco en verano. Allí también se decía que el trabajo duraría nueve horas diarias en toda estación. Para lo que se consagrarían dos horas al día a la enseñanza. El trabajo y la jornada terminarán a las nueve en invierno, y a las ocho en verano, llevando así a penas que recaen directamente sobre el cuerpo, pero a un nivel más psicológico que físico, podría decirse que el castigo recae más sobre el alma que sobre el cuerpo.
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“Los verdugos se juntaron y Damiens les decía que no juraran, que desempeñaran su cometido, que él no los recriminaba; les pedía que rogaran a Dios por él, y recomendaba al párroco de SaintPaul que rezara por él en la primera misa” [1]. Algunos se arrepentían de sus errores y lo único que podían hacer en ese momento era pedir que oraran por ellos, para que cuando murieran Dios los perdonara, ya que no tenían otra forma de remediar sus errores.
[1] Michel Foucault, 1976, Vigilar y Castigar. El cuerpo de los condenados.
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