ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Para otros usos de este término, véase Creacionismo (desambiguación)

hdsakjh13 de Junio de 2013

2.688 Palabras (11 Páginas)316 Visitas

Página 1 de 11

Para otros usos de este término, véase Creacionismo (desambiguación).

Se denomina creacionismo al conjunto de creencias, inspiradas en doctrinas religiosas, según las cuales la Tierra y cada ser vivo que existe actualmente proviene de un acto de creación por uno o varios seres divinos, cuyo acto de creación fue llevado a cabo de acuerdo con un propósito divino.1

La creación de Adán, fresco de 1511 de Miguel Ángel en la Capilla Sixtina.

Por extensión a esa definición, el adjetivo «creacionista» se ha aplicado a cualquier opinión o doctrina filosófica o religiosa que defienda una explicación del origen del mundo basada en uno o más actos de creación por un dios personal, como lo hacen, por ejemplo, las religiones del Libro. Por ello, igualmente se denomina creacionismo a los movimientos pseudocientíficos y religiosos que militan en contra del hecho evolutivo.2

El creacionismo se destaca principalmente por los «movimientos antievolucionistas», tales como el diseño inteligente,3 cuyos partidarios buscan obstaculizar o impedir la enseñanza de la evolución biológica en las escuelas y universidades, arguyendo que existe un debate científico sobre la cuestión. Según estos movimientos creacionistas, los contenidos educativos sobre biología evolutiva han de sustituirse, o al menos contrarrestarse, con sus creencias y mitos religiosos o con la creación de los seres vivos por parte de un ser inteligente. En contraste con esta posición, la comunidad científica sostiene la conveniencia de diferenciar entre lo natural y lo sobrenatural, de forma que no se obstaculice el desarrollo de aquellos elementos que hacen al bienestar de los seres humanos.4

Las cosmogonías y mitos de carácter creacionista han estado y permanecen presentes en muy distintos sistemas de creencias, tanto monoteístas, como politeístas o animistas. El movimiento creacionista políticamente más activo y conocido es de origen cristiano protestante y está implantado, principalmente, en los Estados Unidos.

Índice [ocultar]

1 Origen del término

2 Relación con el evolucionismo

2.1 Creacionismo clásico

2.2 Creacionismo contemporáneo

2.2.1 Creacionismo antievolución actual

2.2.1.1 Diseño inteligente

2.2.2 Creacionismo pro-evolución

3 El creacionismo en los sistemas educativos

4 Posición de la Iglesia católica

5 Descripción hecha por el creacionismo cristiano

5.1 Creación de la Tierra joven

5.2 Creación de la Tierra antigua

5.3 La evolución y extinción de los animales y otros seres vivos

6 Véase también

7 Notas

8 Bibliografía adicional

9 Enlaces externos

9.1 Sitios creacionistas

9.2 Sitios anticreacionistas

9.3 Pespectivas del debate darwinismo frente al creacionismo

Origen del término

Artículo principal: Historia del creacionismo.

Durante la Edad Media, y hasta la actualidad, el término «creacionismo» ha servido en Teología para designar una de dos interpretaciones alternativas para el origen del alma personal, que cada alma es objeto de un acto especial de creación por Dios (v. creacionismo en teología), siendo su alternativa el traducianismo.5 El florecimiento de la filosofía fuera del amparo de la Iglesia, desde el Renacimiento, condujo a un uso casual del término como opuesto al monismo panteísta.6

El rápido éxito social de la teoría de Charles Darwin promovió la reacción no sólo de algunos importantes teólogos, sino también por parte de científicos, los cuales veían en el darwinismo un importante fundamento para el materialismo filosófico, así como una puerta abierta a la refutación del argumento teleológico y cosmológico para la existencia de Dios. El propio Darwin usó en su correspondencia el término «creacionista» para referirse a sus opositores.7 Así aparece en 8 ocasiones en su correspondencia publicada, en misivas dirigidas a Bates, Huxley, Bentham y Hooker.8

Durante mucho tiempo, época conocida como creacionismo clásico, el término no fue usado de manera general para designar la oposición al evolucionismo darwinista, que se designaba en otras formas. En 1929 el biólogo Harold W. Clark, un adventista del Séptimo Día, describió como creacionista la obra de su maestro George McCready Price en el título de un libro autopublicado.9 Durante algún tiempo el término sirvió para describir tanto a los teístas evolucionistas (creyentes a la vez en el Dios creador y en la verdad del darwinismo) y a los fundamentalistas bíblicos que, como los dos autores citados, defendían la literalidad bíblica desde sus títulos universitarios en ciencias.7

Relación con el evolucionismo

Creacionismo clásico

Los creacionistas clásicos niegan la teoría de la evolución biológica y, especialmente, lo referido a la evolución humana, además de las explicaciones científicas sobre el origen de la vida. Por esto rechazan todas las pruebas científicas (fósiles, geológicas, genéticas, etc.). En el creacionismo clásico de origen cristiano se hace una interpretación literal de la Biblia y se sostiene la creación del mundo, los seres vivos y el cataclismo del Diluvio Universal tal como está descrito en el Génesis, sin pretender concretar de manera científica el origen de las especies.

Creacionismo contemporáneo

Creacionismo antievolución actual

A diferencia del creacionismo clásico, en el creacionismo más reciente se trata de utilizar igualmente fundamentos de carácter no religioso a partir de descubrimientos o conocimientos de disciplinas pertenecientes a las ciencias naturales, que se tratan de presentar como si fueran pruebas científicas contra la teoría de la evolución. Se habla así de creacionismo «científico», nombre que le dan sus partidarios. Sin embargo, a diferencia de las ciencias naturales, en este tipo de creacionismo no se sigue el método científico y no se producen hipótesis falsables. Debido a estos hechos, el creacionismo científico no logra reunir totalmente en ninguna de sus formas las características de una teoría científica, y por ello la comunidad científica relacionada con el tema lo describe sólo como una proposición pseudocientífica.

Por otra parte, este tipo de creacionismo contemporáneo trata de desdibujar la distinción entre hecho evolutivo (parentesco y transformación de las especies a lo largo del tiempo) y teoría de la evolución (síntesis evolutiva moderna o «neodarwinismo»), englobándolo todo con el término «evolución», «evolucionismo» o «darwinismo», y descalificándolo como «una simple teoría» (jugando con el doble significado de la palabra teoría en el habla común y en las ciencias naturales).

Así intenta negar el hecho de que la teoría de la evolución es considerada una de las más grandes y sólidas teorías científicas actuales, que describe un hecho sobre el que no existen pruebas o evidencias científicas que lo refuten.10

Diseño inteligente

Artículo principal: Diseño inteligente.

Otra forma más sutil de este tipo de creacionismo es el diseño inteligente, movimiento que no suele hacer explícita su motivación religiosa. Su principal actividad consiste en negar en mayor o menor medida la validez e importancia de las explicaciones evolutivas sobre el origen de las estructuras biológicas, para concluir que es necesaria su creación por intervención directa de un ser inteligente. El diseño inteligente es presentado por sus seguidores como una alternativa al neodarwinismo pero, al no formular hipótesis contrastables, no cumple los requisitos del método científico y es considerado una forma de pseudociencia.

Creacionismo pro-evolución

Artículo principal: Evolución teísta.

Artículo principal: Creacionismo evolutivo.

Las formas de creacionismo nombradas anteriormente son consideradas formas de «creacionismos anti-evolución» porque requieren la intervención directa de un creador. Además de este tipo de creacionismo, existe el «creacionismo pro-evolución» expresado en el creacionismo evolutivo y en una postura filosófica llamada evolución teísta; el creacionismo pro-evolución cree en la existencia de un creador y un propósito, pero sí acepta que los seres vivos se han formado a través de un proceso de evolución natural. Esta forma de creacionismo no interfiere con la práctica de la ciencia, ni es presentada como una alternativa al neodarwinismo, sino como un complemento filosófico o religioso a la teoría de la evolución.11

El creacionismo en los sistemas educativos

Al no basarse en evidencia científica falsable y comprobable, ninguna forma de creacionismo está implementada prácticamente en el sistema educativo de ningún país del mundo, con excepciones tales como las que sucedieron hasta fines del 2005 en algunos estados de Estados Unidos, en los cuales existe una mayoría protestante (en los cuales se trató de sustituir a la evolución en los libros de texto, siendo actualmente un hecho prohibido por una sentencia judicial12 ); o el creacionismo de origen islámico, presente en algunos países con creencia mayoritaria en esta religión.

Posición de la Iglesia católica

La Iglesia católica rechaza una interpretación literal de los primeros capítulos del Génesis y, para su doctrina, cualquier propósito similar ignoraría el sentido de la creación y de Dios mismo, al que se le presenta como fundamento y

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (18 Kb)
Leer 10 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com