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Enviado por vallegaona • 25 de Mayo de 2013 • 3.980 Palabras (16 Páginas) • 234 Visitas
EL MATRIMONIO Y LOS VALORES MORALES
Matrimonio –según su origen bíblico– es la unión de un hombre con una mujer para ayudarse mutuamente y abrirse a la vida. Según otras corrientes modernas, que nosotros respetamos aunque no compartimos, a este concepto primero se han ido añadiendo otros adulterados que en nada se parecen al primero, si bien infinidad de movimientos luchan por equipararlo al concepto genuino de matrimonio. En las iglesias, agosto es el mes de la familia, aunque en realidad todos los meses del año deben estar consagrados a la familia, porque la familia es la base de la sociedad.
La familia –conformada ordinariamente por el padre, la madre y los hijos– tiene sus valores morales que coadyuvan mucho a formar también la verdadera sociedad, donde no debe haber machismos ni desuniones, porque nadie puede gobernar una agrupación grande si no puede gobernar una agrupación pequeña. Destacamos en este comentario algunos valores que constituyen los cimientos de la verdadera sociedad hondureña:
Alegría: Una familia triste es una triste familia. La alegría es un valor que seEL MATRIMONIO Y LOS VALORES MORALES
Matrimonio –según su origen bíblico– es la unión de un hombre con una mujer para ayudarse mutuamente y abrirse a la vida. Según otras corrientes modernas, que nosotros respetamos aunque no compartimos, a este concepto primero se han ido añadiendo otros adulterados que en nada se parecen al primero, si bien infinidad de movimientos luchan por equipararlo al concepto genuino de matrimonio. En las iglesias, agosto es el mes de la familia, aunque en realidad todos los meses del año deben estar consagrados a la familia, porque la familia es la base de la sociedad.
La familia –conformada ordinariamente por el padre, la madre y los hijos– tiene sus valores morales que coadyuvan mucho a formar también la verdadera sociedad, donde no debe haber machismos ni desuniones, porque nadie puede gobernar una agrupación grande si no puede gobernar una agrupación pequeña. Destacamos en este comentario algunos valores que constituyen los cimientos de la verdadera sociedad hondureña:
Alegría: Una familia triste es una triste familia. La alegría es un valor que se
EL MATRIMONIO Y LOS VALORES MORALES
Matrimonio –según su origen bíblico– es la unión de un hombre con una mujer para ayudarse mutuamente y abrirse a la vida. Según otras corrientes modernas, que nosotros respetamos aunque no compartimos, a este concepto primero se han ido añadiendo otros adulterados que en nada se parecen al primero, si bien infinidad de movimientos luchan por equipararlo al concepto genuino de matrimonio. En las iglesias, agosto es el mes de la familia, aunque en realidad todos los meses del año deben estar consagrados a la familia, porque la familia es la base de la sociedad.
La familia –conformada ordinariamente por el padre, la madre y los hijos– tiene sus valores morales que coadyuvan mucho a formar también la verdadera sociedad, donde no debe haber machismos ni desuniones, porque nadie puede gobernar una agrupación grande si no puede gobernar una agrupación pequeña. Destacamos en este comentario algunos valores que constituyen los cimientos de la verdadera sociedad hondureña:
Alegría: Una familia triste es una triste familia. La alegría es un valor que se
EL MATRIMONIO Y LOS VALORES MORALES
Matrimonio –según su origen bíblico– es la unión de un hombre con una mujer para ayudarse mutuamente y abrirse a la vida. Según otras corrientes modernas, que nosotros respetamos aunque no compartimos, a este concepto primero se han ido añadiendo otros adulterados que en nada se parecen al primero, si bien infinidad de movimientos luchan por equipararlo al concepto genuino de matrimonio. En las iglesias, agosto es el mes de la familia, aunque en realidad todos los meses del año deben estar consagrados a la familia, porque la familia es la base de la sociedad.
La familia –conformada ordinariamente por el padre, la madre y los hijos– tiene sus valores morales que coadyuvan mucho a formar también la verdadera sociedad, donde no debe haber machismos ni desuniones, porque nadie puede gobernar una agrupación grande si no puede gobernar una agrupación pequeña. Destacamos en este comentario algunos valores que constituyen los cimientos de la verdadera sociedad hondureña:
Alegría: Una familia triste es una triste familia. La alegría es un valor que se
EL MATRIMONIO Y LOS VALORES MORALES
Matrimonio –según su origen bíblico– es la unión de un hombre con una mujer para ayudarse mutuamente y abrirse a la vida. Según otras corrientes modernas, que nosotros respetamos aunque no compartimos, a este concepto primero se han ido añadiendo otros adulterados que en nada se parecen al primero, si bien infinidad de movimientos luchan por equipararlo al concepto genuino de matrimonio. En las iglesias, agosto es el mes de la familia, aunque en realidad todos los meses del año deben estar consagrados a la familia, porque la familia es la base de la sociedad.
La familia –conformada ordinariamente por el padre, la madre y los hijos– tiene sus valores morales que coadyuvan mucho a formar también la verdadera sociedad, donde no debe haber machismos ni desuniones, porque nadie puede gobernar una agrupación grande si no puede gobernar una agrupación pequeña. Destacamos en este comentario algunos valores que constituyen los cimientos de la verdadera sociedad hondureña:
Alegría: Una familia triste es una triste familia. La alegría es un valor que se
EL MATRIMONIO Y LOS VALORES MORALES
Matrimonio –según su origen bíblico– es la unión de un hombre con una mujer para ayudarse mutuamente y abrirse a la vida. Según otras corrientes modernas, que nosotros respetamos aunque no compartimos, a este concepto primero se han ido añadiendo otros adulterados que en nada se parecen al primero, si bien infinidad de movimientos luchan por equipararlo al concepto genuino de matrimonio. En las iglesias, agosto es el mes de la familia, aunque en realidad todos los meses del año deben estar consagrados a la familia, porque la familia es la base de la sociedad.
La familia –conformada ordinariamente por el padre, la madre y los hijos– tiene sus valores morales que coadyuvan mucho a formar también la verdadera sociedad, donde no debe haber machismos ni desuniones, porque nadie puede gobernar una agrupación grande si no puede gobernar una agrupación
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