APRENDER JUGANDO: UNA EXPERIENCIA PARA LA VIDA

APRENDER JUGANDO: UNA EXPERIENCIA PARA LA VIDA.

Rodar una rueda con una llanta, lanzar un trompo y hacerlo girar, brincar sobre un lápiz dibujado en la tierra, lanzar los dados en una partida de parque  y mover las fichas, llenar la  tarjeta de la lotería, saltar en sacos, brincar la cuerda, son juegos emocionantes, que nos relajan, divierten y acercan a nuestros familiares, vecinos, amigos o compañeros de clase o colegio.

Recrearnos de esta manera implica una participación activa tanto a nivel físico como mental, esta actividad es muy diferente del ocio, ya que este solo busca el descanso de una forma más pasiva, en cambio la recreación busca satisfacción, diversión y puede brindarnos sentimientos gratos de bienestar pues nos permiten romper con la rutina y las obligaciones cotidianas, y así aliviar el estrés acumulado.

Ahora bien, la recreación y el juego pueden ser una herramienta poderosa en el campo de la pedagogía, y cuando el juego se practica con el objetivo de enseñar y aprender se convierte en Lúdica, es como dijo Albert Einstein: “Los juegos son la forma más elevada de la investigación”, podemos aprender mientras jugamos, explorar a través de los sentidos y comparar lo que ya sabemos con las experiencias nuevas que vivimos a través del juego, esto nos da la posibilidad de conocer mejor el mundo que nos rodea, y ese es el objetivo de la Lúdica, que a través del juego, el individuo aprenda y adquiera nuevos conocimientos, es interesante que no se diga “el niño” sino “el individuo”, porque para aprender jugando no hay edad límite, todos necesitamos del juego sin importar la edad que tengamos.

Sin embargo, debemos saber que el juego podría ser una pérdida de tiempo,  cuando no se tiene una estructura de aprendizaje experiencial para desarrollarlo, el aprendizaje experiencial es una oportunidad de vivir para aprender, por medio de nuevas experiencias construidas por el propio individuo, creando así espacios para el aprendizaje utilizando la auto-exploración y la auto-experimentación.

Todo lo anterior revela que la lúdica es necesaria para el crecimiento  personal, ya que estimula la imaginación,  la creatividad y la libertad, cualidades esenciales para el desarrollo integral del ser humano. Existen muchas personas  que han desarrollado habilidades y destrezas a través del juego, lo cual demuestra que el juego sano y en compañías saludables puede ser provechoso en sentido emocional, corporal e intelectual.

Claro está, de forma equilibrada, porque el exceso de la recreación y del juego, pueden causar el efecto contrario, es decir, cansancio físico y mental, sueño durante el día, déficit de atención en el aula de clases o en el trabajo y el lado opuesto, o sea no jugar o mostrar apatía al juego, podría crear una persona sedentaria, obesa y con problemas de relaciones personales, por eso se puede decir que el juego y la recreación en la vida son como el postre en una comida, el postre es muy delicioso pero no es el plato principal, si se come primero y en grandes cantidades puede ser dañino, de igual modo, el juego y la recreación son muy necesarios pero no son lo principal en la vida, si se le da el primer lugar y se le dedica mucho tiempo podría ser dañino, pero en pequeñas dosis es espectacular y hasta edificante.

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