Arquitectura
yhoneyker5 de Diciembre de 2013
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INTRODUCCION A LA ARQUITECTURA
La arquitectura es el arte y técnica de proyectar y diseñar edificios, otras estructuras y espacios que forman el entorno humano. El término “arquitectura” proviene del griego (arch, cuyo significado es ‘jefe’, ‘quien tiene el mando’), y (tekton, es decir, ‘constructor’ o ‘carpintero’). Así, para los antiguos griegos el arquitecto es el jefe o el director de la construcción y la arquitectura es la técnica o el arte de quien realiza el proyecto y dirige la construcción de los edificios y estructuras, ya que la palabra (techne) significa ‘saber hacer alguna cosa’. De ella proceden las palabras ”técnica” y también “tectónico” (constructivo).
Según el tópico popular, en el tratado más antiguo que se conserva sobre la materia, De Architectura, de Vitruvio, Siglo I a. C., se dice que la arquitectura descansa en tres principios: la Belleza (Venustas), la Firmeza (Firmitas) y la Utilidad (Utilitas). La arquitectura se puede definir, entonces, como un equilibrio entre estos tres elementos, sin sobrepasar ninguno a los otros. No tendría sentido tratar de entender un trabajo de la arquitectura sin aceptar estos tres aspectos.
Periodos Históricos de la Arquitectura
Edad Antigua
• Arquitectura de Mesopotamia
• Arquitectura caldea
• Arquitectura asiria
• Arquitectura medo-persa
• Arquitectura egipcia
• Arquitectura mesoamericana
• Arquitectura egea
• Arquitectura griega clásica
• Arquitectura etrusca
• Arquitectura romana
Edad Media
• Arquitectura rusa
• Arquitectura bizantina
• Arquitectura visigoda
• Arquitectura prerrománica (Prerrománico asturiano)
• Arquitectura merovingia
• Arquitectura arábiga
• Arquitectura románica
• Arte cisterciense
• Arquitectura gótica
Edad Moderna
• Arquitectura renacentista
• Arquitectura barroca
• Arquitectura neoclásica
• Arquitectura colonial española
Siglo XIX
• Arquitectura historicista
• Arquitectura ecléctica
• Arquitectura del Hierro
Siglo XX
• Modernismo o Art Nouveau
• Arquitectura moderna
• Movimiento Moderno
• Realismo socialista
• Arquitectura orgánica
• Arquitectura High Tech
• Arquitectura postmoderna
• De constructivismo
• Arquitectura sustentable
Siglo XXI
• Arquitectura biónica
Tipos y estilos de Arquitectura
Arquitectura doméstica: Es decir, los edificios de vivienda, está producida por una unidad social básica, que puede ser el individuo, la familia, o el clan y sus equivalentes. Esta arquitectura cubre las necesidades básicas de albergue y seguridad del hombre, y como tal puede ser una arquitectura muy simple, reducida a un único espacio, pero al tiempo puede ser una arquitectura muy compleja que reúna en sí no sólo las necesidades básicas de vivienda, sino también las necesidades económicas básicas de una unidad familiar, agrícolas, industriales o comerciales.
Arquitectura religiosa: Dada la importancia de la religión en las distintas civilizaciones, este tipo de edificios constituyó con frecuencia uno de los elementos más significativos producidos por los artistas de cada cultura.
Arquitectura funeraria: Este tipo de arquitectura surge por la creencia del hombre en la existencia de otra vida después de la muerte, y en la necesidad de dejar una memoria permanente en este mundo.
Arquitectura institucional: El desarrollo de la arquitectura institucional o gubernamental es tan extenso como el de la arquitectura religiosa, con la diferencia de que las funciones a las que deben adaptarse los edificios son similares en todas las sociedades: legislar, administrar e impartir justicia son las funciones básicas que debe cubrir el Estado.
Arquitectura del bienestar y de la educación: Las instituciones públicas destinadas al bienestar ciudadano son las que, en la actualidad, proporcionan los recursos para la educación, la salud y la seguridad. Tradicionalmente muchas de estas actividades han sido asumidas por la iglesia o por el estado, pero requieren soluciones arquitectónicas que, por su propia especificidad, se alejan de la arquitectura religiosa o de la institucional comentada.
Arquitectura recreativa: Pocas actividades recreativas requieren la utilización de tipologías de edificios propias hasta que no se organizan como eventos públicos. A partir de este momento se tiene que prever la participación activa o pasiva de individuos, como ocurre con la mayor parte de los acontecimientos deportivos, funciones musicales, obras dramáticas, o en actividades privadas pero que se realizan en edificios públicos como baños, museos, bibliotecas.
Arquitectura industrial y comercial: La arquitectura industrial y comercial responde a la necesidad de intercambio, de transporte, de comunicación, de fabricación, de almacenaje, etc., es decir, a todas las exigencias de la actividad económica del hombre. Hasta la revolución industrial estas actividades no eran especializadas, se resolvían dentro de la arquitectura doméstica. Solamente el lugar del mercado requirió en alguna ocasión una estructura arquitectónica especial. Sin embargo, la revolución industrial y el inicio de la producción en masa determinaron que el número de personas destinadas a una misma actividad en el mismo lugar se incrementara radicalmente, lo que obligó al diseño de lugares de trabajo para gran cantidad de personas. La revolución industrial afectó profundamente a las técnicas y a las tipologías arquitectónicas. A través de la introducción de la máquina y la producción en masa, la vida económica salió del ambiente doméstico, en el que se había movido desde siempre, a un área dominada más por los procesos y los dispositivos que por los individuos, lo que originaba la necesidad de edificios especializados para tales fines, edificios de oficinas, almacenes y mercados, para el intercambio de mercancías; fábricas, minas, laboratorios, plantas de transformación para la producción; caminos, puentes, túneles, estaciones de ferrocarril, aeropuertos, etc., para el transporte; estructuras para la transmisión y recepción del teléfono, la radio, la televisión, el periódico, los libros, etc., para la comunicación; presas, centrales de energía, etc., para la distribución de energía.
El proyecto arquitectónico: El arquitecto debe tener en cuenta en su proyecto arquitectónico tres elementos que, generalmente, van a condicionar de forma global todo su trabajo. Éstos son el emplazamiento, la tipología y el coste de un edificio. Es decir, el emplazamiento va a determinar las variaciones que, dependiendo del medio natural, se han de introducir en un edificio para que éste se pueda ajustar a las necesidades físicas invariables de los seres humanos. La tipología determina la estructura, requerida por la sociedad, a la que debe ajustarse el edificio dependiendo del uso al que esté destinado. El coste implica la suma económica a la que debe quedar sujeta la realización global de ese edificio.
El emplazamiento: El entorno natural es, inmediatamente, un obstáculo y una ayuda en un proyecto arquitectónico. Para hacer edificios habitables y cómodos, se debe controlar los efectos naturales el calor, el frío, la luz, el aire, la humedad, etc., y prever las posibles fuerzas destructivas el fuego, los movimientos sísmicos, las inundaciones, etc. Los métodos para controlar este medio natural deben estar previstos y ser recogidos en el proyecto. Este entorno natural ha condicionado durante siglos la construcción, así la denominada arquitectura vernácula o popular recoge como principal característica la adecuación al medio natural en que se gesta; incluso, esta adecuación al medio ha creado, en la antigua China, toda una filosofía sobre la forma de construir edificios, el denominado Feng Shui, que enseña a vivir de acuerdo con las fuerzas del entorno.
La orientación, es decir, la disposición de las partes de un edificio, debe estar dirigida a controlar los efectos del sol, del viento, de las precipitaciones, y de todos los agentes climáticos.
Dentro de los edificios, el eje y la colocación de cada espacio determina la cantidad de sol que recibe. La orientación puede controlar la circulación del aire, reducir las desventajas de la lluvia y de la nieve, teniendo en cuenta que las características climáticas son poco variables y por tanto se pueden prever. Las características del ambiente inmediato también influyen en la orientación, los árboles, los edificios circundantes, la existencia de carreteras, etc., modifican las condiciones climáticas generales, intensificándolas o disminuyéndolas.
La tipología del edificio proyecto de uso: La planificación de los usos o funciones de un edificio determina, de forma global, la tipología de edificio que se ha de elegir. Cada actividad humana presenta unas necesidades propias, el arquitecto debe analizar y ofrecer una solución a los requisitos demandados; esta solución se encuentra analizando y diferenciando los espacios para las distintas funciones a las que está destinado y facilitando la circulación entre estos espacios.
Proyecto económico: Los costos más importantes en la construcción de un edificio se centran en el terreno, los materiales y el trabajo. En todos los casos los costos son altos cuando la materia es escasa y son baratos cuando es abundante. Cuando los costos están limitados
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