Cultura teotihuacana

Cultura teotihuacana

“¡lugar en que los dioses se convierten en hombres!”

La cultura teotihuacana fue una cultura muy bella que floreció desde el año 200 antes de Cristo donde algunos grupos se instalaron en ese valle, formaron sus propias aldeas donde aprovecharon ¡lo bello y grande de sus manantiales!, aprovecharon ¡al máximo las tierras fértiles! De este lugar, para así progresar día a día. Teotihuacán significa "Ciudad de Dioses", y fue llamada así cuando los aztecas la descubrieron, porque quedaron maravillados por ella y pensaron que sólo los dioses la pudieron haber construido, o porque las divinidades la habían elegido para crear ahí el universo. Esta ciudad es el más grande centro ceremonial de toda mesoamérica. llegó a tener 250.000 habitantes. Se desarrolló en el valle de Teotihuacán situado en las tierras altas que rodean a la actual capital mexicana. Sus habitantes se dedicaban principalmente al comercio de la obsidiana. Con ella se hacían adornos ornamentales, herramientas, armas o incluso se han encontrado instrumentos para el uso quirúrgico muy primitivos, pertenecientes a la cultura teotihuacana.

También llamada la gran metrópoli clásica del valle de México, se supone se formó, hacia fines del Preclásico Superior por varios grupos que participaban en la cultura de esa época, desarrollándose allí culturalmente y formando algunas aldeas agrícolas, aprovechando los manantiales y las tierras fértiles del lugar. Tras varias investigaciones supusieron que los llegados a Teotihuacán eran de un grupo llamado Tolteca y por ende los toltecas fueron los autores de esa gran cultura llamada Teotihuacana. Aunque esta teoría aún no ha sido comprobada existen conocimientos en contra y a favor.

Teotihuacán se divide en tres fases culturales llamadas: Teotihuacán I (300 a 0 A.C.), Teotihuacán II (100 A.C. a 200 D.C.) y Teotihuacán III (200 a 650 A.C.).

En Teotihuacán, surge el mayor centro religioso y cultural de la época y es donde florece con mayor esplendor el urbanismo, la escultura y las arquitecturas monumentales, las formas arquitectónicas del tablero y el talud, la pintura mural, la alfarería en serie, un ceremonial religioso complejo, el politeísmo, entre otras cosas. Es así, como el adelanto cultural que obtuvieron durante el Preclásico o Formativo en los aspectos culturales, económico, técnico, social y religioso fueron lo suficientemente grandes para que los teotihuacanos estuvieran la capacidad de construir centros verdaderamente urbanos y ciudades planificadas, por lo cual, para mi punto de vista es muy importante preservar esta cultura, sus costumbres, sus tradiciones, sus artesanías, sus murales, su arquitectura, pero también es importante hacer que Teotihuacán “florezca” una vez más hagamos que el turismo, nacional e internacional, idolatre a nuestra

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