Después de cinco siglos, la explotación en el Potosí Boliviano continúa

Después de cinco siglos, la explotación en el Potosí Boliviano continúa. Primero fueron los indígenas a mano de los españoles y ahora son los niños a manos de las grandes empresas internacionales. Estos niños tienen  que trabajar extensas horas de trabajo duro dentro de los túneles de las minas ya sea perforando huecos para colocar dinamitas o extrayendo las rocas para la extracción de minerales por un mínimo salario. En el video podemos percibir el esfuerzo que realizan estos niños que la mayoría no pasa los 15 años de vida para poder tan solo comer, y ayudar a su madre y a sus hermanos. Vemos las condiciones de vivienda que tienen, que ni siquiera energía eléctrica ni agua tienen en sus casas, las casas que por lo general están al pie de la montaña con un piso de tierra y en muy malas condiciones las paredes y el techo y aún bajo estas condiciones se podría decir que  viven contentos con su familia. Otra cosa que causa tristeza es que la mayoría de  estos niños que nacen  ahí están condenados a ser mineros toda la vida sin tener la oportunidad de elegir ellos mismos que es lo que realmente quieren ser. Por estadística, el promedio de vida de los mineros esta entre los 35 y 45 años, esto debido a la gran cantidad de polvo que respiran que se les va acumulando en los pulmones hasta que terminan con enfermedades respiratorias causando la muerte. Entonces desde mi punto de vista duele saber que estos niños solo van a vivir esa corta vida de trabajo duro sin oportunidades de cambiar su vida. En el video vemos como la mirada del niño nos transmite dolor, tristeza, el peso del trabajo que mantiene siempre su vida en riesgo y les piden a su dios llamado Tios que lo proteja. Pero a pesar de todo cada día se esfuerzan por salir  adelante y dejar ese pasado oscuro en las mina

A veces miramos alguna prenda de plata y decimos que linda, es hermosa, pero muchos no conocemos cual fue el origen de esa prenda, ni el trabajo que se hizo para obtenerla. Una de las minas más grandes de plata está ubicada en potosí, una ciudad de Bolivia.  Esta mina se encuentra en una montaña llamada cerro rico, donde trabajan  miles de personas, entre esas personas niños pequeños de 12 hasta 14 años de edad que son sometidos a un duro trabajo y peligroso trabajo donde cada día puede ser el último debido a algún tipo de derrumbe en los túneles de la mina. Esto resulta increíble porque es difícil creer que en el mundo en que vivimos aún existe la explotación infantil a tal punto. Estos niños mineros muchos viven en la montaña y desde que nacen están destinados a ese tipo de trabajo desde edades muy prematuras. Estos pequeños  mineros tienen un dios dentro de las minas al cual le piden que los proteja de cualquier accidente de trabajo debido a que trabajar dentro de la mina es extremadamente peligroso. Podemos ejemplificar el valor que le dan a los estudios y la emoción que proyectan por asistir a la escuela y superarse para lograr una mejor vida para su familia. Y sin embargo existen muchos niños en otros lugares que tienen la oportunidad de estudiar sin tener que trabajar y no aprovechan esa oportunidad, mientras que por otro lado  muchos darían hasta lo que no tienen para poder estudiar. Otra cosa interesante es la sencillez y la humildad con que viven estos niños que solo tienen una ropa que ponerse, carecen de muchos objetos de primera necesidad y aun así demuestran su gran amor por la familia, el ayudar a alguien sin recibir nada a cambio. Por esto yo pienso que estas personas nos sirven de ejemplo para esforzarnos por  ser mejor cada día, para darle valor a las cosas que tenemos y  para aprovechar las oportunidades que nos da la vida.

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