Disciplina Escolar

INTRODUCCIÓN

La disciplina escolar se ha convertido en una de las grandes preocupaciones de muchos centros educativos dentro de los que entran los de la educación especial. El trato de los estudiantes para con los docentes se ha hecho insolente e insostenible, los modos de cortesía, raya, la grosería, el nivel de exigencia roza el mínimo. Los estudiantes buscan lo fácil, lo cómodo, lo que no requiere esfuerzo.

Históricamente la disciplina escolar se ha tratado desde una perspectiva “de rendimiento” en el sentido de que había que recurrir a ellos cuando surgían problemas de comportamiento en el aula.

La disciplina escolar es un factor tan importante en el proceso enseñanza aprendizaje, que de ella deben proponerse desarrollar en el educando un verdadero espíritu de autodisciplina y autocontrol.

Así mismo, Ander-Egg (2005), señala:

la disciplina amenaza y perturba especialmente el funcionamiento de los institutos de enseñanza de básico y secundaria. En todos los países de América Latina, Europa y de manera más acentuada en Estados Unidos, la mayoría de los profesores se quejan del comportamiento de los estudiantes, y se sienten importantes frente al problema de indisciplina. (p.46)

Es preocupante los expresado por este autor, ya que hace tres décadas atrás era considerado como secundario en el orden de prioridad en las preocupaciones instruccionales de los diferentes sistemas educativos del mundo la disciplina escolar, pero hoy ha pasado a ocupar una casi indiscutible primer puesto. De esta misma manera y siguiendo el mismo orden de ideas.

Gotzens (1997), expone:

No se va a entrar aquí en la consecuencia educativa que ellos importan pero aun análisis somero de esta cuestión pone de manifiesto que el desplazamiento de inquietudes en el sentido de priorizar lo que por ser, no merecía más consideraciones que las condiciones necesarias, pero en modo algunos suficientes para llevar a cabo el proceso de enseñanza aprendizaje en el aula, deja un segundo plano del interés por el proceso en sí mismo, y sin duda, este desplazamiento está teniendo una amplia trascendencia en el mundo escolar. (p.34).

El autor deja en claro cuán importante es el problema que a escala mundial, es el reflejo de la crisis de valores que viene padeciendo hoy por hoy la humanidad. Además se hace evidente que el problema de disciplina que presentan los estudiantes de la escuela especial tales como: pelea, agresiones verbales, toda esta situación conflictiva es consecuencia de la crisis de valores por la que atraviesa la humanidad. Venezuela es uno de los países más afectados por la problemática que presentan los estudiantes en cuanto a disciplina, un mal que se ha extendido por todos los Estados de la sociedad transformando el clima organizacional en todos los planteles del Sistema Educativo venezolano.

La indisciplina que se presenta en la mayoría de los planteles perturba el buen funcionamiento del quehacer educativo, así como también afecta a los organismos que se encargan de dirigir la educación. Esto se palapa en el hecho de ver a la mayoría de los docentes quejándose, pues expresan su incapacidad para manejar la indisciplina, ya que esta le impide ejercer su profesión con eficiencia porque gran parte de su tiempo y energía lo invierten en tratar de controlar la disciplina en sus discípulos que cada día se hacen más insoportables.

Todos los planteles generalmente tiene un conjunto de normas explicitas e implícitas que fueron creadas para regular las actividades y las interrelaciones de los miembros de la comunidad que la conforman. Estas normas llamadas de convivencia, tiene el propósito de resguardar la seguridad de los estudiantes, docentes y personal en general, en clase y recreo, y la posibilidad de trabajar en un ambiente que favorezca el aprendizaje significativo. No obstante, todas estas normas explicitas e implícitas son transgredidas por los estudiantes y el resultado desconsolador que se produce en un ambiente caótico, en donde es casi imposible enseñar y aprender, y en donde las relaciones humanas se violentan.

La escuela como institución de orden social debe procurar buscar y mantener la buena disciplina porque ningún grupo de personas puede trabajar en conjunto, exitosamente sin establecer normas y reglas de conducta, respeto mutuo y un sistema de comunicación de valores que orienten a cada uno de los estudiantes y demás miembros de la comunidad educativa a desarrollar.

En el estado Sucre al igual que los demás estados de Venezuela, la crisis de disciplina que se está viviendo en los planteles es de pronóstico reservado. En el último quinquenio, se viene observando con preocupación, como este fenómeno social ha ido en detrimento de valores en los estudiantes: la paz y la armonía de los recintos educativos, así también el rendimiento académico, la indisciplina que hoy impera en los carteles del Estado ha llegado hasta el extremo que pareciera que el valor moral que reina en las instituciones educativa es la Violencia Estudiantil.

Esta situación conflictiva que se agudiza cada día más, se destaca un alerta que denota la imperiosidad de tomar acciones y medidas contundentes que redunden en la recuperación de la paz, la armonía y de una convivencia sana en los estudiantes de todos los niveles y modalidades, en valores para la vida. Por ello se toma la célebre frase de Simón Rodríguez (1828) “Inventamos o erramos”, lo cual se orienta a superar, fortalece y desarrollar en los estudiantes cualidades y virtudes que vayan en pro de su bienestar y en la formación de valores.

En el caso particular de I.E.E.B “Simón Bolívar”, ubicado en Cumaná vía Bolivariano, con la pasantía del Programa Nacional de formación de educadores (PNFE) se pudo constatar a través de diferentes métodos empíricos que los estudiantes presenta la siguiente problemática de disciplina:

• Falta de puntualidad.

• Ciertas actitudes agresivas en el aula hacia el docente.

• Se agreden verbal y físicamente unos con otros.

• Dicen palabras obscenas en el aula.

• En algunos momentos quieren salir del aula sin pedir permiso.

Como se supone, todas estas manifestaciones de indisciplina inciden en el rendimiento estudiantil, y se constituyen en uno de los cursos que originan los conflictos y el desorden en todas las actividades y programas. Por ello, en el aula es imprescindible que exista una disciplina adecuada para que toda la organización del plantel facilite los procesos de

...