Discurso A Jubilados

Buenos días.

Es un gusto enorme para su servidor, hacer uso de la palabra y expresar el mensaje de felicitación por la labor cumplida de una excelente persona y mucho más, excelente maestra de esta institución.

El día de hoy estos dos maestros terminan su tiempo laboral, han llegado a 30 años de servicio docente.

Durante todo este tiempo, infinidad de alumnos han pasado por sus aulas para aprender de la vida, de la ciencia, del arte y de la emoción. Quiero pensar en los ahora profesionistas y padres de familia, que con mucho cariño y respeto nos acompañan; en los estudiantes del nivel medio superior y superior egresados de esta escuela y en los alumnos que forman parte de nuestra institución pero que en años recientes han estado bajo la tutoría conducción de estos 2 maestros que hoy cumplen con satisfacción y la frente en alto por la labor realizada de preparar 30 generaciones de niños con la más alta de las calidades.

Profr. Ramón Briceño, lo felicito y reconozco en Usted a la persona amable, formal, dedicada a su trabajo y llena de disciplina. Que con mucha responsabilidad ha formado a sus alumnos durante 30 años. Sé que tiene muchas metas y propósitos todavía por realizar. Le deseo el mayor de los éxitos, felicidad y salud en su vida ahora que se jubila.

Profra. Ma. de Jesús Hernández (de cariño, maestra Jesusita), estoy muy contento de haber trabajado con Usted, ya que en este tiempo he aprendido que la vida es una y hay que vivirla con alegría: cantándole, bailándole, sonriéndole, hasta saltándole. He visto que deja un hueco muy difícil de llenar en esta escuela. Todos los alumnos la recordarán con admiración y respeto y cantarán como usted lo hace, cantarán a la vida con esa cálida emoción y simpatía.

Tengo la fortuna de despedir y agradecer el día de hoy a dos grandes de nuestra escuela. El personal de la institución, sus compañeros de trabajo, han preparado un pequeño pero muy significativo acto en nuestra vida institucional. Felicidades!!

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