Discurso De Investidura – UASD - Hato Mayor

Discurso De Investidura – UASD - Hato Mayor – 2018

Estudiante: Noelia Alarcón

Buenos días, señora Rectora Magnífica de nuestra Universidad Autónoma de Santo Domingo, Dra. Emma Polanco; buenos días, Maestro Alejandro Moquete Jiminián, Director de nuestro Centro UASD - Hato Mayor y con él a las demás autoridades que engalanan la mesa de honor, autoridades civiles y militares, docentes, compañeros graduandos, familiares, amigos, comunicadores, público en general.

Es para mí más que un privilegio estar hoy en este solemne acto de investidura, en representación de mis compañeros y compañeras graduandos.

En este día podemos decir que hemos alcanzado un sueño, una meta que solo se consigue con trabajo y perseverancia en el que recibimos el título que nos acredita como profesionales.

Por tal razón es oportuno agradecer al ser más poderoso, grande y majestuoso que es DIOS, por la fortaleza y sabiduría, para culminar con éxito nuestra meta de ser profesionales cualificados.

Muchas gracias a nuestras familias, que han sido el impulso, apoyo y motivación para que hoy podamos decir que a pesar de las pruebas y dificultades hemos logrado nuestro objetivo.

 Hago mención especial a mi madre Nidia De Salas y a mi abuela, Efigenia Fulgencio, quienes con amor y esmero han sabido guiar a sus hijos por el camino correcto. 

Queremos darle el mérito a nuestros maestros por ser imitadores de maestro por excelencia que es nuestro Señor Jesucristo que nos han brindado del pan de enseñanza sin mezquindad con la intención de transformarnos hasta convertirnos en profesionales acabados, como piezas terminadas, a pesar de que debemos seguir afianzando conocimientos de cada una de nuestras carreras podemos decir que hay una excelente base.

No podemos dejar de agradecer a nuestros amigos por su disposición para contribuir con nuestro proyecto de vida, por darnos aliento y estar siempre dispuestos a llenar nuestro mundo de alegrías.

Más que agradecidos con nuestros compañeros de estudio durante todo el transcurso de nuestra formación académica, juntos hemos emprendido este importante proyecto y sin el apoyo que nos dimos unos con otros no hubiera sido posible. Superamos con altura y amor, nuestras diferencias.

Compartimos tantos retos y desafíos, sin sabores, tristezas y desvelos, pero siempre tuvimos la convicción de que un día llegaríamos y que bueno, que emoción, que felicidad este día llego.

Un agradecimiento especial a nuestra Magna Universidad Autónoma de Santo Domingo, especialmente nuestro Centro UASD- HATO MAYOR, por acogernos como ave que cuida su nido y esperó de nosotros que nos transformáramos de pichones indefensos, a aves y pájaros de alas tan fuertes capaces de emprender los más altos viajes, brindándonos la educación a la cual todos los habitantes del país tenemos derecho.

Hace unos años, con humildad y responsabilidad, asumimos el reto de ingresar a esta Magna Universidad, todos con un mismo propósito, incursionar en el maravilloso mundo del saber.  Hoy 17 de septiembre del año 2016, es un día inolvidable para cada uno de nosotros, en el cual podemos afirmar que, pese a las adversidades propias de una población de estudiantes que en su gran mayoría provienen de familias de escasos recursos económicos, podemos constatar con regocijo que tuvimos el valor  para dar lo mejor de nosotros y alcanzar este peldaño tan significativo como lo es nuestra graduación y recibir nuestro título  universitario.

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