ENSAYO ANNIE SOPHIE BRASME

Anne Sophie Brasme, nacida en 1984, en Metz, Francia, es una escritora francésa.

Brasme escribió su primera novela a los 16 años de edad, que lleva por nombre; Respira.

Se trata de una amistad que degenera hasta el punto de la obsesión, de la humillación, incluso, de la muerte.

Esta novela, le dio el éxito y la fama a su corta edad, posicionando el libro, en la lista de los más vendidos en Francia. Posteriormente, este se tradujo y se adaptó para venderse en 17 países.

Respira, es la cruda confesión de la adolescente Charlene Boher de 19 años, que fue acusada de matar a su mejor amiga, y relata su historia detrás de su celda en prisión.

Charlene, cuenta su infancia, y que tal vez, en ese punto de su vida,  radicaron sus problemas. Solía ser una niña bastante rebelde, y en su vida empezaron a surgir los cambios, cuando sus padres, decidieron separarse.

Pasaba por una etapa difícil, cuando conocio a Vanessa, su primer mejor amiga. En ella encontró el consuelo, la confianza, y la libertad de ser quien quería ser; de soñar. Su amistad duro 6 años, y no termino porque sí, sino porque Vanessa tuvo que mudarse de ciudad.

Fue difícil para Charlene, porque en ese momento, ya se había convertido en una persona dependiente. Entro a la secundaria, y conocio a Sarah, el primer día, noto que todos le ponían atención, y en el fondo la envidiaba, porque no podía ser como ella. Su vida estaba en un punto fatal, tenia transtornos de anorexia y bulimia e intento quitarse la vida al no atender un ataque de asma. Fallo. Y fue ahí donde Sarah se acerco a ella, para brindarle su apoyo y su amistad.

Fueron las mejores amigas ese primer año, y vivian casí juntas, sabían todo la una de la otra, y dentro de Charlene, ya comenzaba a despertarse esa obsesión hacia Sarah.

Todo cambio cuando en verano, ambas fueron de vacaciones a diferentes lugares, y se alejarón. La mente revolcada de Charlene, pensaba que Sarah ya la había olvidado, y cambiado por alguien más, sus celos enfermos la cegaban, y sabía que volvería a estar sola.

Comenzó a cortarse las venas, a fumar cigarrillos, a vestirse con ropa oscura, a demostrar que no le interesaba más su vida. Y ahí, volvío Sarah a su vida, pero esta vez, no por mucho tiempo.

Ahí comenzó el control, y la humillación por parte de Sarah

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