El Proceso De Paz De Colombia En La Habana, Cuba: ¡Mentira!

Valentín Restrepo Rueda

Universidad Sergio Arboleda

Septiembre 9, 2013

El proceso de paz de Colombia en la Habana, Cuba: ¡Mentira!

El proceso de paz del presidente Santos y la guerrilla llamada FARC, no dista de aquel fallido -proceso- del expresidente Pastrana; está destinado al fracaso. Coinciden en el mismo fundamento: primero, que el grupo guerrillero aludido constituye el motor de la guerra; segundo, los actores del proceso son las mismas élites (gobierno y FARC); y, finalmente, es evidente que el grupo guerrillero mentado impone sus reglas en las llamadas “conversaciones”. En consecuencia, el proceso de paz de Colombia que se adelanta en Cuba, es una ¡Mentira! Así, será materia de otro trabajo auscultar lo que subrepticiamente en realidad pretende el gobierno nacional con ello.

Palabras claves: proceso de paz, FARC, ELN, BACRIM, paramilitarismo, gobierno nacional, sociedad civil, Colombia

Iníciese por precisar que según la Universidad Nacional (2012), el grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) tiene presencia, a octubre de 2012, en dieciséis departamentos de Colombia. Sumado a ello, existen otras guerrillas como el Ejército Popular de Liberación (EPL), que desarrolla sus actividades en el departamento de Norte de Santander. Por su parte, de acuerdo con el CERAC (2011), el neo paramilitarismo (lo que para la Universidad Nacional, 2012, serían las BACRIM) tiene presencia violenta en diecisiete departamentos. Existen guerrillas y “BACRIM”, según la Universidad Nacional (2012), en los treinta y dos departamentos de Colombia, sin incluir –a mi juicio- la llamada “delincuencia común”. De este modo, el proceso de paz actual, como el intentado por Pastrana, carece de gran parte de los autores –no solo actores- de la violencia, la guerra y el conflicto en este país. Tras esta situación ¿Cómo se pretende conseguir la paz desconociendo que la violencia tiene múltiples actores y autores en Colombia?

En relación con lo segundo, tratase de un tema propio de las élites, el asunto de la paz. Los negociadores del gobierno son los mismos políticos o sectores fuertes que históricamente han estado en la pugna por estar en el poder. Gómez (2013) afirma que dichos negociadores son: “(…) los poderes reales del país (un Ex Vicepresidente de la República, dos generales en retiro, la cabeza del primer gremio empresarial)” (P. 6). Obsérvese la ausencia de la participación de la sociedad civil. Querubín (1998) precisa:

(…) la participación de la sociedad civil es fundamental para lograr que el nuevo pacto de paz no se limite a formalizar una redistribución del poder entre los actores armados y que, por el contrario, exprese y materialice la voluntad de superar la exclusión mediante compromisos concretos sobre cómo generar una nueva institucionalidad para la convivencia pacífica entre todos los colombianos.

Leguizamo (2002) plantea: “(…) es importante revisar y estudiar experiencias de participación de la sociedad (…) de tal forma que puedan tanto contribuir

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