El bosque de los gritos

El Bosque de los Gritos

Cuenta la leyenda que en el bosque negro hace miles de años al anochecer se escuchaban los gritos mas aterradores que podían existir, y el que entraba al bosque después de la caída del son no regresaba jamás.

El bosque negro quedaba cerca de un pueblo llamado la virtud, el bosque era muy conocido ya que de allí provenían las mejores leñas, usualmente los leñadores tenían un horario de entrada y salida.

Cierto día uno de los leñadores llamado Agustino no llego temprano al trabajo porque uno de sus hijos tenia cáncer y había amanecido muy grave. Al llegar al trabajo su jefe lo esperaba molesto con la intención de correrlo, le pide que pase a su oficina y le dice:

• Agustino últimamente hemos bajado la producción por tu irresponsabilidad, he tomado la decisión de correrte.

El suplica y le dice al jefe: - por favor, necesito el dinero, si me despide que hago con mi familia e hijo enfermo?

El jefe se queda en silencio pensando y dice: - tienes razón amigo, te conozco desde hace mucho tiempo y se cuanto necesitas el dinero. Así que te puedes quedar pero en vista de lo sucedido te toca quedarte mas tarde que los demás.

Agustino dice: - ¡gracias jefe no le fallare!

• Eso espero. – dijo el jefe

Después de la conversación, salió a trabajar como un día común.

Al atardecer cuando todos se retiraban, uno de los leñadores se acerca y le advierte.

• Cuidado Agustino no te vayas muy tarde que en el pueblo hay rumores de que el bosque grita de noche, y el que esta en el, no vive para contarlo.

Agustino entre risas le dice, - tranquilo Juan son solo rumores.

Ya cuando todos se habían ido, empezó a caer la noche. Agustino empezó a sentirse mareado sin razón alguna, cuando su trabajo estaba terminado, sintió una sensación de miedo y se desmayo justo cuando entraba al bosque.

Aproximadamente a las 12 de la noche Agustino empezó a reaccionar y extrañado por lo sucedido recordó las palabras de su compañero de Juan, en lo que pudo levantarse recogió sus cosas de trabajo y se dirigió a la salida, ya un poco asustado.

A solos unos pasos para salir del bosque, Agustino escucho un llanto como de un bebe, su instinto como padre lo llevo hacia donde se escuchaban los ruidos, haciéndole regresar al bosque.

Los llantos provenían de un árbol que estaba cerca de un pozo. Agustino se detiene y se queda pensando unos segundos, luego trato de regresar pero estos llantos se hicieron mas fuerte, esto hizo que Agustino sintiera mas necesidad que curiosidad por ver lo que había en el pozo.

Agustino se asoma lentamente y ve a dos niños sentados al final del pozo con un bebe al lado, el notó que los tres estaban llorando y repetían sin cesar ¡ayúdennos por favor! ¿papá mamá donde están? Agustino trato de ayudarlos pero al ponerse en la punta del pozo, sintió una brisa muy fuerte que hizo que cayera en el. Al tratar de salir se dio cuenta que estaba atrapado en arena movediza, los niños ya no estaban, habían desaparecido cuando el cayo. Desde ese mismo momento Agustino empezó a gritar sin descanso… hasta que se dejaron de escuchar sus gritos.

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