HUMILLACIÓN

HUMILLACIÓN ENSAYO

En el siguiente ensayo trataré de elaborar un punto de vista temático en el cual exponga los diferentes tipos de humillación que se avecinan en nuestro diario vivir en especial en nuestra sociedad y haciendo énfasis en el gobierno actual y pasado dejando en claro éste término para la mejor comprensión dentro de un sistema estructuralizado.

Es importante comenzar en definir en términos coloniales que es humillación Se refiere al acto y emoción generada por la capacidad que tiene un individuo o un grupo social de denigrar, devaluar o hacer sentir menos a otro u otros de su misma especie; basándose en las diferencias sociales, culturales, forma de pensar, sexo, entre otras características que emergen en la sociedad. Dicho sentimiento aparece, principalmente, en el momento en que la persona humillada, se da cuenta que lo sucedido le afecto directamente a sus sentimientos y/o autoestima.

Nos queda claro que humillación en una forma más abreviada es la capacidad de denigrar a una persona o un grupo social. ¿Cómo podemos utilizar éste término en los ámbitos políticos? Podríamos comenzar refutando el anarquismo, el cual nos dice que toda sociedad basada en instituciones de gobierno es una sociedad humillante, en otras palabras los mandatos de gobierno son causa de humillación para un ente social. Refuto esta idea puesto que una ley no se trata de humillación ya que de éstas están rodeadas la vida y las sociedades en general. De leyes a leyes, toda con una finalidad diferente pero buscando un mismo fin. Reprimir la anarquía como nos dejan ver los anarquistas según su concepto de humillación no dejará ver el desarrollo de una sociedad puesto que estará privada de autonomía por los gobiernos que ejercen el poder, no es más que un concepto impropio sin justificación ya que un gobierno es elegido por el pueblo dentro de la democracia de un país.

Al momento de elegir una persona que llevará un cargo tan importante deberíamos de tomar en cuenta la autonomía que tiene cada uno de los ciudadanos, la cual no se puede transferir y se nace sin caducidad. Concretándolo desde el punto de vista momentáneo, es decir en lo que estamos viviendo en el presente, la humillación se da no en un término tan drástico como nos lo deja claro el anarquismo, pero si está comenzando a dar fruto ese tipo de humillación, ya que en nuestro presente se está convirtiendo en humillación el no poder tomar una decisión que no conlleva a todos a un bienestar o en un rotundo problema.

Un ejemplo claro está en la nueva implementación que “nuestro gobierno” generó hace un par de horas sobre la nueva campaña de uniformes gratuitos para escuelas y colegios públicos, en la cual el gobierno lanzará con millones esta campaña y no licitará públicamente la adquisición de material y mano de obra que generará empleo con un tiempo de caducidad puesto que son contratos ya con una persona dada sin beneficiar a todos los micro empresarios que trabajan en ese arduo trabajo.

Humillante es estar bajo la lupa de todos los demás países por la toma de decisiones mal obradas y haber generado un caos e irrespetado nuestra constitución al no respetar las leyes implementadas desde hace muchos años, haciendo una “sucesión” porque se quería realizar una “encuesta”.

Todos estos miles de ejemplos de situaciones vividas en los últimos tiempos son de grado humillante para una sociedad que conlleva a miles de persona, puesto que estas personas hablan por ellas y no por lo que los ciudadanos puedan estar interesados en sentir o hacer.

Es aquí donde hacemos una pausa y llegamos a pensar sobre el concepto anarquismo donde ninguna institución de gobierno es decente por la carencia de este enorme valor como es la humildad y la gran abundancia de soberbia y totalitarismo que nos gobierna en estos tiempos de violencia, falta de trabajo,

...