Impacto de los diferentes tipos de activos en la liquidez de la empresa

Maryorie Gómez

2006-2223

Impacto de los diferentes tipos de activos en la liquidez de la empresa

Se considera la liquidez, la solvencia y la rentabilidad de una empresa, como la capacidad de generar fondos con los que pagar, en tiempo y cantidad, nuestros compromisos a nuestros acreedores, y de generar margen que posibiliten los beneficios que luego vuelven a la empresa.

El autor pretende resaltar el papel del Activo a largo plazo como el elemento básico de de las fases de producción y generación de ingresos y en consecuencia, beneficios, situando los objetivos en relación de la liquidez, solvencia y rentabilidad con el Activo a largo plazo situandolo en sentido global.

También se pretende incorporar el concepto de intangible en sentido amplio, para poder medir la solvencia bajo la óptica de la generación de las misma, dándole una gran presencia al Activo a largo plazo en estos cálculos.

Esta revalorización es motivo de la experiencia que nos ha hecho abandonar criterios más clásicos como el de la liquidez se genera en el activo circulante cuando en realidad es una consecuencia de la actividad que radica en el largo plazo. Igual como el relacionar el activo total con la solvencia no corresponde ya que si vendemos los activos para saldar deudas, dejamos de producir y por ende existir. La rentabilidad es fruto de la producción y por ende no debemos relacionar los beneficios solo con las ventas y olvidarnos del activo fijo.

Por eso es propio decir que en los activos a largo plazo es donde radica la liquidez, solvencia y rentabilidad y es importante señalar como los indicadores usados de manera tradicional no informan del origen de estos. Incluso en los cálculos habituales de la solvencia  pasan por considerar que cualquier activo puede servir para liquidar deudas. Que la liquidez se origina en el  activo circulante o que la rentabilidad radica en los beneficios de ventas.

Situémonos en la idea de que el activo es el elemento productivo, el que produce. Dentro del activo hay integrantes que son a corto plazo y otros a largo plazo, ambos son importantes pero donde reside la capacidad productiva es en el de largo plazo. El activo a corto plazo incide indirectamente en la generación de ingresos pero es el activo a largo plazo que incide directamente ya que por su naturaleza es controlable y permite programación, teniendo la oportunidad de corregir errores fácilmente.

Con esto podemos decir que los activos a largo plazo son el corazón que mueve la empresa, ya que este produce, la venta de esta producción genera liquidez para afrontar pagos, para hacer adquisiciones, para pagar a los accionistas e invertir de nuevo en activos a largo plazo.

Dentro de los activos a largo plazo tenemos dos:

Tangible: cuyo precio de adquisición es objetivo y comprobable en cualquier momento, su amortización es fácil.

Intangible: No se ve pero se siente, es lo que posibilita que el tangible pueda operar. Ejemplos son, nombre comercial, imagen pública, calidad de la clientela, calidad de proveedores, etc.

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