LA CHINA POBLANA
Enviado por 8173514 • 12 de Septiembre de 2014 • 454 Palabras (2 Páginas) • 740 Visitas
LA CHINA POBLANA
Mirrah-Catarina, fue una princesa india secuestrada y vendida por corsarios en 1621 en el mercado de Manila, Filipinas. La compro el capitán poblano Miguel de Sosa. Muerto el matrimonio de Sosa paso a servir a casa de un sacerdote donde llevo una vida casi conventual. Se caso con un esclavo chino, pero llevo una vida casta. Al enviudar se retiro a un aposentillo donde paso donde paso el resto de su vida en medio de rezos, ayunos y penitencias. Murió supuestamente en olor de santidad. Su nombre cristiano fue Catarina de San Juan.
La leyenda cuenta que al llegar a Puebla, la princesa india usaba un primoroso vestido cuajado de lentejuelas y chaquiras, que las jóvenes poblanas se apresuraron a copiar logrando así el traje de china poblana.
En realidad nadie conoce el origen exacto del traje, pero para 1930 ya no había la menor duda de que el atuendo de la china poblana era el traje que representaba a las mujeres mexicanas por excelencia.
El traje consta de una falda cuajada de lentejuelas con el escudo nacional y la blusa bordada a mano, con hilo o chaquira. Sin dejar atrás el rebozo de seda o algodón y los zapatos, ya no de raso, sino de cuero y tacón.
La falda roja se elabora con una tela de lana muy fina; castor, llamada así por su semejanza con la suavidad del pelo de este animal. Dicha tela venia decorada con flores y puntos y era un lujo en sí misma. Desde la época colonial, por el tamaño en que ésta se vendía, la falda no llegaba hasta el piso, de modo que se le añadía un lienzo, generalmente de seda a partir de la cintura. El castor se empezó a decorar con el bordado de lentejuela y chaquira de origen oriental, mas tarde probablemente fue durante la última etapa del porfiriato, se le agregaron los símbolos patrios.
Actualmente el castor ha sido sustituido por franela.
El castor mide 1.80 cm., la falda terminada debe medir 2.40 de ancho por 80 cm de largo. Las vendedoras del Parian que bordan el castor se tardan hasta 3 meses en una falda “cuajada”.
La blusa es de popelina blanca se borda con chaquira o con hilo. La decoración de la blusa es muy variada; flores, aves, animalitos, figuras geométricas, etc. Antes de bordarse la blusa se dibuja con sellos, para que sirvan de guía a las bordadoras.
Bajo el castor usan una enagua blanca con cenefa en la orilla de ganchillo o encaje. También usan un rebozo potosino, collares de papelillo, trenza con raya en medio y listones de colores para sujetarla. Complementan el traje con zapato de tacón mediano en verde o rojo. Anteriormente los zapatos eran de raso.
Julia González
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