LA ESCRITURA, MÁQUINA DEL TIEMPO
CARLOS01037424 de Noviembre de 2011
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LA ESCRITURA, MÁQUINA DEL TIEMPO.
La escritura es el arte de convertir las imágenes del pensamiento en elementos físicos para que puedan ser interpretadas por todos. Esto supone el compartimiento de un conjunto de signos (código) comunes tanto a quienes escriben como a quienes interpretan. Mediante la palabra escrita, no sólo se pueden expresar los más delicados sentimientos individuales, como lo haría un poeta a través de su confeccionada lira, sino que también pueden acopiarse los distintivos rasgos culturales pertenecientes a un determinado colectivo.
La lectura de un buen libro puede llevarnos desde un simple momento de recreación con la magia de un cuento, aprendizaje de un juego, manualidad, receta, entre otros, hasta la más compleja jornada de estudio que implica la reorganización de estructuras mentales con altos niveles de conocimiento (desarrollo y comprensión de complicadas formulas, por ejemplo).
La escritura atrapa períodos del tiempo como atrapa una fotografía una imagen del pasado. Gracias a ésta, numerosísimas investigaciones y estudios han quedado registrados y almacenados como preciados tesoros que esperan ser descubiertos para el disfrute de su riqueza. El proceso de escritura (entendido como toda forma gráfica utilizada para comunicar) funciona, entonces, como una “máquina del tiempo” en la que sólo hay que accionar (leer) un dispositivo (textos) para que el portal del tiempo se active y se vislumbre toda forma de cultura suscitada a lo largo de la historia de las distintas civilizaciones.
La mencionada máquina del tiempo posee en todo el mundo “botones” (libros) creados por infinidades de escritores que continuamente van ampliando el poder del “artefacto”. Con el avance de la tecnología se han incorporado interruptores virtuales (“Link” o enlaces de internet) con los cuales se puede acceder a los escritos que llevan a diferentes épocas.
Con fines de ejemplificación, “viajemos” a 15 000 años a.C. presionando (leyendo) el botón (Obra: Historia de la República Bolivariana de Venezuela, 7°grado) proporcionado por el escritor Alberto Arias Amaro y nos encontraremos en la Venezuela del Período Indígena que “Empieza con el poblamiento primitivo del territorio por los aborígenes (…) y termina en el año 1498 d.C. con el descubrimiento.” Pero podemos ir más atrás y visitar por ejemplo la “Era de los Dinosaurios” si activamos el interruptor virtual (Página Web) denominado Wikipedia para observar que “Estos grandes reptiles dominaron la Tierra durante la era Mesozoica…”
La máquina del tiempo (“La Escritura”) puede “transportarnos” también a diferentes lugares para conocer lo que ocurre en el presente a través de la activación (lectura) de botones especiales denominados “Diarios”, “Revistas”, “Semanarios”, “Periódicos”, entre otros. Los perfeccionadores de este artefacto (escritores) trabajan actualmente para la incorporación de nuevos botones (registro de datos) que podrán ser activados cuando nuestro presente se convierta en pasado y las futuras generaciones quieran saber de nuestra actuación.
Ni siquiera el futuro escapa de esta máquina del tiempo, pues existen científicos y visionarios escritores que han colocado “botones” (textos) en los que se predicen acciones futuras. Ejemplos de estos “botones” lo constituyen las novelas de Julio Verne en las cuales predijo la invención de la televisión, el submarino, la nave espacial, entre otros. Las predicciones de la Biblia también representan otro ejemplo. En los actuales momentos existen numerosísimos botones (documentos) que nos llevan al futuro para advertirnos de las predicciones sobre catástrofes futuras producto de nuestra intervención en el desequilibrio ecológico. Gracias al aporte del científico Gerald
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