La Obesidad

Estamos tan acostumbrados a vivir a un ritmo acelerado que si estamos sin hacer nada nos sentimos culpables, incluso dicen que el ocio es la madre de todos los vicios, nosotros diríamos que también es la madre de muchas grandes ideas. ¿Por qué?

El tiempo libre forma parte de nuestro equilibrio, pues nos permite descansar mente, cuerpo y espíritu, es decir, a recargar baterías para seguir con nuestras actividades cotidianas. El ocio además alimenta nuestra creatividad, nuestras relaciones y nuestra imaginación.

¿Cómo aprovechar nuestro tiempo libre?

Relajación total.- Disfruta de recostarte en el pasto o tu sillón favorito, hojea una revista que te interese o simplemente deja que tu mente divague por un rato.

Traga libros.- Es una de las formas más útiles de aprovechar el tiempo libre, pues leer enriquece a cualquiera, te da un escape y te permite conocer culturas, lugares y situaciones inimaginables.

El artista de clóset.- La creatividad no debe desperdiciarse ni dejar que fallezca poco a poco, retoma ese lado artístico, ya sea escribiendo, pintando, tomando fotografías, etc.

Cuerpo sano.- Dedica este tiempo a tu salud, sal a caminar, inscríbete a una clase de baile, ve al gimnasio o haz ejercicio en el parque.

Saca la agenda.- A veces dejamos que la rutina nos envuelva tanto que dejamos de ver a nuestros amigos o familiares, utiliza este tiempo para encontrarte con aquellos a los que no ves hace mucho tiempo.

Yo, yo y yo.- Lo mejor que puedes hacer por ti es dedicarte tiempo, desconéctate del mundo, encuéntrate contigo mismo y tendrás más claridad para seguir con el día a día.

Ahora sí nada de culpas, aprovecha el ocio haciendo lo que más te gusta.

Vida sedentaria

El estilo de vida sedentario es un neologismo médico usado para indicar la inactividad durante la mayor parte del día (por ejemplo, estar sentado en una oficina), realizando poco o ningún ejercicio físico. Se cree que este modo de vida, típico de la sociedad occidental, es un factor que contribuye a la obesidad. Por tanto, también puede contribuir a otras enfermedades, como diabetes tipo II, enfermedad cardíaca, depresión o hemorroides.

La carencia de ejercicio físico causa atrofia muscular, es decir, encogimiento y debilitamiento de los músculos, lo que aumenta la posibilidad de lesiones. Además, una buena forma física está correlacionada con el sistema inmunológico, de tal forma que si disminuye la forma física suele debilitarse el sistema inmunológico.

A pesar de las ventajas conocidas de la actividad física, muchos adultos y niños siguen un estilo de vida relativamente sedentario y no son lo bastante activos como para conseguir los beneficios que produce una vida activa para la salud. Los ordenadores, la televisión

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