La adolescencia. Expresion propia

LA ADOLESCENCIA

"No considero que deba darse mucha importancia al peso, los músculos, ni el andar a la moda el cabello, aunque cuando esto ocurre,…es agradable”

Muy buenos días Madre Directora, Señora Subdirectora, Respetables miembros del Jurado calificador, maestros y compañeros, mi nombre es Rodrigo Ernesto Rivas Orellana y vengo hablarles sobre la adolescencia.

La adolescencia es un periodo en el desarrollo biológico, psicológico, sexual y social inmediatamente posterior a la niñez que comienza con la pubertad en la que se experimenta una búsqueda y crisis de identidad. Es una etapa de la vida la cual para algunos es terrible y molesta, mientras que para otros, pasa casi inadvertida. Esta depende de un sin número de factores como lo son la niñez que tuvimos, la familia, la sociedad en la que nos desarrollamos y el grupo de amigos con quien convivimos. En esta etapa existe un conflicto constante entre los padres y el adolescente, debido a la falta de comunicación.

Nosotros los adolescente no comprendemos porque se no quiere controlar, no entendemos porque se nos presiona y exige tanto. Exigimos  más libertad e independencia y tenemos infinidad de problemas de autoridad, no soportamos la idea de aceptar que alguien nos quiera controlar y ordenar. Nos molesta el tener que depender de nuestros padres para realizar algunas actividades. Tenemos problemas de permisos y horarios. Nuestros padres se molestan por nuestra pereza, pero el dormir en exceso no es pereza. Uno como adolescente gasta demasiada energía a lo largo del día, y esta energía la recuperamos por medio del sueño y el descanso.

Hay momentos en nuestra vida que nos cuesta trabajo poner atención y nos aburrimos con facilidad y es cuando solo quisiéramos pasar en nuestros celulares, computadoras o consolas de juegos por todo el día, sentados en el  sofá o en la cama sin que nadie nos moleste y el único momento en que nos levantamos es cuando buscamos comida o para ir al baño, pero es parte de esta etapa tan difícil para nosotros. No siendo estables y constantes en nada. Claro que existen sus acepciones.
En ocasiones nos sentimos los dueños del mundo; es ahí cuando tomamos decisiones intrépidas o arriesgadas, sin antes pensarlas, ni analizando sus consecuencias. ¿Qué adolescente no ha sentido la tristeza de quererse apartar de todo y de todos? Aquí es donde se manifiestan los síntomas de la depresión como: problemas para dormir, problemas escolares, excesos alimenticios e incluso el suicidio. Una de las cosas que influye mucho en esto es la necesidad de sentirnos aceptados y encajados dentro de un grupo.

Es aquí donde el grupo de amigos se  vuelve uno de los factores fundamentales de la adolescencia ya que en él se construyen todos los objetivos, metas, retos, planes de vida, relaciones amistosas y nuevas subjetividades. Nosotros los adolescentes nos sentimos cómodos y felices dentro del grupo de amigos porque ahí expresamos nuestras inconformidades, nuestros gustos, nuestras experiencias, creando así un ambiente de alegría el cual para nosotros es muy reconfortante porque cuando tenemos problemas es en el grupo de amigos donde nos sentimos apoyados. Por eso muchas veces preferimos estar con los amigos que con la familia. 

Ahora viéndolo desde el punto de vista de los padres podemos notar que ellos están frustrados y enojados ya que desconocen totalmente al “nuevo integrante de la familia” por así decirlo, no soportan el tener que aceptar la idea de que su hijo necesita más libertad e independencia. Pero lo que el joven no tiene en mente y que el padre sostiene es que si exige más libertad y más independencia, por reacción merece tener más obligaciones y ser más responsable.
Además es importante que los padres sepan adonde y con quien se dirigen sus hijos para así poder evitar problemas de conducta, de adicciones, alcohol, drogas, accidentes automovilísticos y delincuencia juvenil.
Muchos de los problemas de delincuencia en El Salvador son realizados por adolescentes, esto se presenta por la falta de comunicación y atención por parte de los padres y la rebeldía característica de la adolescencia. Para evitar todos estos problemas es importante que exista y se lleve a cabo un dialogo constante y fluido en el cual el hijo se sienta totalmente apoyado y no criticado por parte de sus padres. Así cuando tengamos algún problema va a ser cómodo el encuentro con nuestros padres. Cuando tengamos alguna duda o se nos presente una situación sea fácil y agradable el pedir un consejo o ayuda, ya que ellos solo quieren nuestro bienestar y deberíamos escucharlos más, después de todo ellos también fueron adolescentes, con su ayuda podemos superar de mejor manera esta etapa de nuestra vida y ser en el futuro personas de éxito.  

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