Lechugas Orgánicas

En la agricultura se han utilizado los abonos orgánicos desde la antigüedad, como factores que mejoran la calidad de los cultivos, garantizando así un producto de calidad para el consumo humano. El abono orgánico se obtiene de la transformación de residuos orgánicos como estiércol y residuos agrícolas en humus, por la acción de bacterias, hongos y otros organismos. Los abonos orgánicos brindan gran cantidad de nutrientes y a largo plazo ayudan a mejorar la composición química y biológica de los suelos. Los abonos orgánicos según la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA, 2012) son todos aquellos residuos de origen animal y vegetal de los que las plantas pueden obtener importantes cantidades de nutrimentos; el suelo, con los procesos de descomposición de estos abonos, se ve enriquecido con carbono orgánico y mejora sus características físicas, químicas y biológicas. Según la Gaceta Oficial del Distrito Federal publicada en Noviembre de 2012, son materiales para compostaje, la Fracción Orgánica de los residuos sólidos urbanos y de los generados por las actividades agrícolas, pecuarias y forestales, excepto: Aquellos residuos orgánicos clasificados como peligrosos por la Norma NOM-052-SEMARNAT-2005 y los lodos o biosólidos, producto del tratamiento de aguas residuales. Tan importante es el abono para el suelo que, es imprescindible en todo campo de cultivo. El composteo, por su parte es, según la Norma Ambiental para el Distrito Federal NADF-020-AMBT-2011, la descomposición aeróbicade residuos orgánicos como restos vegetales y animales (incluso fecales) en condiciones controladas de aereación, humedad, temperatura y mezcla inicial (composición que se realiza con insumos de distintas características) por medio de la participación masiva de organismos tales como bacterias, hongos e insectos. Su elaboración exige un lugar al aire libre, así como condiciones óptimas de sol y sombra durante el día. La composta es el producto que se obtiene del compostaje, conformando así un abono rico en nutrientes para las plantas. El compostaje es un proceso que se lleva a cabo de forma cotidiana en la naturaleza, cuando por ejemplo las hojas secas de los árboles caen al suelo y son cubiertas por más hojas, poco a poco las hojas que cayeron primero irán degradándose hasta formar nuevo suelo, de la misma forma, se puede llevar a cabo la formación de suelo de forma controlada con el compostaje y su producto (composta), de forma que puedan retornar los nutrientes presentes en los residuos orgánicos al suelo y enriquecerlo con ellos. La elaboración de composta con los diversos residuos de materia orgánica que se generan día con día en el hogar es una práctica que a pesar de ser muy sencilla, aún es poco común, cabe mencionar que es necesario promover el compostaje casero para generar así una alternativa de uso y manejo de residuos sólidos orgánicos, disminuyendo así el impacto ambiental que estos pudieran producir. Existen varios procesos para la elaboración de composta; la elección de una técnica para su elaboración depende, entre otras cosas, de la cantidad y tipo de material con el que se cuenta, disponibilidad de tiempo y de terreno, complejidad operacional y del producto final que se desea obtener. Las técnicas varían desde las muy sencillas que utilizan botes o pozos, hasta las muy estrictas en las que se utilizan grandes composteros e incluso pilas con volteo mecánico (en el caso de composta elaborada a nivel industrial).El uso más común de la composta es el de abono orgánico pero por sus propiedades y microorganismos se puede utilizar como activador estimulando la descomposición de la materia en un nuevo proceso de compostaje; (SAGARPA 2012), actúa también como inoculante

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