Los Celos

LOS CELOS

Joselin estaba sola e indefensa, cuando Luis le rodeó el cuello con ambas manos y se lo presionó con fuerza hasta privarla del conocimiento. No conforme con ello, fuera de sí, el tipo cogió un cable conductor de electricidad y la ahorcó.

El asesino de Joselin no pudo con los remordimientos y, dos horas después de cometer el crimen, se entregó en la comisaría de Santa Elizabeth. Llegó solo. Estaba nervioso y tenía los ojos rojos, señal de haber llorado. Al primer policía que se le cruzó, le contó todo. ¡Maté a mi mujer!, ¡la maté!, ¡la maté!, repitió desesperado y, minutos después, condujo a los agentes al escenario del homicidio.

A las 6.30 de la mañana las autoridades descubrieron el cadáver, confirmando la dramática y violenta historia que les acababa de relatar el detenido. Luis contó a los investigadores que discutió con Joselin porque se amaneció el domingo en la calle. El martes, según el criminal, pelearon por el mismo motivo. A las 4.30 am del miércoles pasaron de las palabras a los golpes.

Fue en esas circunstancias que el celópata decidió acabar con la vida de su conviviente.

Cada día incrementan los diversos casos de violencia contra la intrafamiliar y muchos de ellos tienen desenlaces fatídicos. Mayormente el agresor atribuye su accionar a los celos.

¿Qué son los celos?, todos alguna vez hemos sentido esa extraña sensación. Al respecto encontré las siguientes definiciones:

“Respuesta emocional compleja y perturbadora, que surge cuando una persona percibe una amenaza hacia algo que considera propio. Comúnmente se denomina a si a la sospecha ante la posibilidad de que la persona amada nos reste atención a favor de otra”

Por otro lado, patológicamente cuando hablamos de personas celosas, nos encontramos un perfil definido por la pasión, la ansiedad, el neurotismo e incluso algo de sadomasoquismo. Estas personas tienen un profundo sentimiento de abandono, que la otra persona ser ha burlado de ellos y sus sentimientos, que los han utilizado. Todo esto les puede llevar del amor al odio en cuestión de segundos y el objeto de su amor pasa a ser el objeto de su actual odio. Cuando se llega a esta situaciones cuando se pueden producir agresiones físicas y psicológicas.

Los celos mal llevados al extremo constituyen una patología fuertemente autodestructiva; el sujeto que padece esta enfermedad "vive" en un estado de infelicidad, en función de sus miedos y sospechas de engaño, muchas veces completamente infundados y prácticamente no acepta otra condición de verdad que no sean las evidencias que confirman su inseguridad en la relación. Los celos patológicos pueden manifestarse indistintamente en hombres o mujeres.

Los celos causan mucha angustia e infelicidad y aún provocar el daño al ser objeto del celo, incluso hasta provocar una respuesta física de agresión desmedida terminando, en el secuestro, en el asesinato o agresión física. Este nivel de celo es muy difícil de curar y las personas que lo padecen tienen grandes posibilidades de llegar a situaciones extremas si no se someten a un especialista.

En el ámbito jurídico considero que los celos causan un problema, no solo por los delitos que se pueden cometer bajo su efecto, sino también porque se debe obtener un análisis psicológico preciso de la conducta y personalidad de los sujetos celosos. El parricidio se encuentra estipulado en el Código Penal con una pena privativa de la libertad no menor de 15 años.

En conclusión:

• Para determinar jurídicamente la sanción que se aplicaría a un caso de delito atribuido a los celos, es muy importante la pesquisa psicológica, para poder determinar los atenuantes o agravantes del caso.

• La percepción de los sujetos celópatas

...