Los Esteroides Anabólicos

UNIVERSIDAD LOYOLA DEL PACÍFICO

TALLER DE LECTURA Y REDACCIÓN II

Los anabólicos y esteroides

Por

Alejandro Vela

Los anabólicos y esteroides

Una persona se forja mediante el fracaso, cuando aprende de él y se supera a sí mismo, pero ¿qué pasa cuando no establecemos nuestro límite para después romperlo? “Al igual que en el culturismo, el fracaso es también una experiencia necesaria para el crecimiento en nuestras propias vidas, porque si nunca somos probados a nuestros límites, ¿cómo sabremos lo fuertes que realmente somos? ¿Cómo vamos a crecer?”. (Arnold Schwarzenegger. 1993)

Con base a la cita anterior, se puede saber que una persona necesita superar su propio límite para crecer, para saber de qué es capaz de hacer, para lograr más de lo que espera, pero cuando se topa con trampas como las alteraciones o irregularidades se encontrará en un estado de confusión, no solo por el hecho de no saber cuál es su propio límite, sino por no saber cómo romperlo de manera personal y natural.

Dicho esto, se genera una duda en cuanto al tema a exponer, ¿se debe prohibir el uso de esteroides anabólicos en el arte del fisicoculturismo? Al intentar contestar esta pregunta pueden aparecer diversas opiniones, desde un simple sí o no, hasta una regulación o moderación de ellos, que en cualquier de los casos, apoyan a las respuestas cortas.

Antes de empezar a argumentar y exponer el punto de vista que se defenderá, se deben considerar los siguientes términos con sus respectivos conceptos:

Prohibir: Vedar o impedir el uso o la ejecución de algo. (RAE. 2014) Esteroides: Sustancia de estructura policíclica de la que derivan compuestos de gran importancia biológica, tales como los ácidos biliares y algunas hormonas. (RAE. 2014) Anabólicos: Sustancias que tienen como función principal la síntesis de las proteínas corporales. (RAE. 2014) Fisicoculturismo o Culturismo: Práctica de ejercicios gimnásticos encaminada al excesivo desarrollo de los músculos. (RAE. 2014)

Teniendo en cuenta que ya se han definido los términos necesarios para entender la tesis principal, se procederá pues a argumentar y defender la postura de una manera convincente y lógica, basada en datos duros y ejemplares del tema.

¿Se debe prohibir el uso de esteroides anabólicos en el arte del fisicoculturismo? Totalmente. Cuando se desglosa el significado de excesivo desarrollo de los músculos se entiende como la acción posible a realizar de manera natural, mientras que con el uso de fármacos que alteran la síntesis de proteínas se estaría haciendo trampa en el proceso de competencia, ya que resultan sus efectos de manera más rápida, más no efectiva.

Hay un gran desacuerdo en cuanto al uso de esteroides anabólicos en el culturismo, y es que los competidores que llegan a usarlos cuando concursan tienen una probabilidad más alta de ganar un buen lugar por la definición y volumen más desarrollado gracias a estas sustancias (que por cierto, son nocivas para la salud si no se suministran de manera consciente y profesional) que alteran el organismo.

Más allá de prohibir estos fármacos por la ambición de ganar este tipo de competencias, conseguir un “cuerpo perfecto” o la fama y patrocinio por marcas deportivas conocidas, debería ser establecido un reglamento en el cual se prohíba estrictamente el uso de los esteroides anabólicos para preservar la salud de los atletas y evitar la pérdida y mal caracterización del bello deporte que es el culturismo.

Una investigación de la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale encontró que el uso de estas sustancias puede provocar una pérdida “catastrófica” de células cerebrales. Por su parte, el doctor Orlando Sevilla, preparador físico de atletas, confirmó que producen varios efectos perjudiciales y por eso se prohíbe su uso para los deportistas. “Los esteroides influyen en un aumento de masa corporal, en el desarrollo de musculatura, en reparación de daños musculares e incrementa la capacidad de realizar ejercicio físico” (Orlando Sevilla. 2004)

Es de vital importancia señalar que al usar los esteroides anabólicos se pueden adquirir diversos efectos colaterales, que van desde algunos que son físicamente poco atractivos como el acné y el desarrollo de senos en hombres (ginecomastia), hasta los que ponen en peligro la vida, tales como la hipertensión, ataques al corazón, trastornos cardiovasculares, daños en el hígado y la infertilidad. Al crearse un desbalance en

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